39.

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Al siguiente día fui al comedor, todos estaban ahí, intenté parecer normal, aún seguía mal por lo que me había contado Tonks.

Me senté a lado de Sirius.

—Buenos días, papá — saludé.

—Hola hija, ¿Cómo amaneciste? — preguntó.

—Bien, gracias — dije — papá, estaba pensando en que podíamos hablar, ya sabes que quiero conocer más sobre mi madre.

—Lo voy a pensar, hija — respondió.

—Esta bien, papá — digo y sonrió levemente.

—Nosotros tenemos algo que decirles — dijo la profesora Potter en voz alta y todos le pusimos atención, ella y el profesor Lupín se agarraron las manos — Remus y yo, nos vamos a casar — dijo sonriendo, fue una noticia impactante y alegre para todos.

—¿Cuándo será la boda? — preguntó Harry.

—En agosto — respondió el profesor Lupín — Decimos hacer algo pequeño, solo familia y amigos, ya que ambos sabemos que en esta época es raro que hagamos una boda, sobre todo cuando Voldemort regreso, pero ya hemos esperado mucho — dijo y sonrió levemente.

—Me alegra mucho — dije.

—Ya era hora, esperaron tanto para este momento — dijo Sirius.

—Si, me hubiera gustado que James estuviera aquí — dijo la profesora Potter en un tono triste, el profesor Lupín le susurró algo al oído, ella sonrió levemente.

La mañana paso rápido y todos hablábamos de la boda, fue una buena noticia, más para esta época llena de malas noticias.

Hasta ahora yo no tenía noticias de Draco, ni de Theo, solo Daphne me escribió, la última carta fue cuando aún estaba en casa de mi papá, Snape, yo le dije que nos veríamos en Hogwarts, nada más.

Más tarde, estaba en mi cuarto, leyendo uno de mis libros, de repente alguien toco la puerta.

—Esta abierto — dije en voz alta y entró Fred — Hola, Fred ¿Qué haces aquí? — pregunté.

—¿No esperabas verme? — preguntó cerrando un poco la puerta.

—Yo no estoy esperando a nadie, nadie me quiere, mi propio padre no me quiere — dije en un tono frío.

—¿Tu padre? Pero el te quiere mucho — dijo.

—Tiene una manera extraña de querer, se supone que las vacaciones eran para conocernos y no está aquí — guarde mi libro — Date cuenta, desde que estuve con Draco todo el mundo me trata diferente.

—Yo no soy diferente, yo aún te quiero... como mi amiga — aclaró nervioso.

—Gracias, pero no es suficiente, necesito el calor de un padre, y créeme que Sirius no se esfuerza, está siempre detras de Harry; no voy a culpar a Harry, es culpa de Sirius, el extraña tanto a James que cree que puede remplazarlo con Harry — dije.

—Solo intenta hablar seriamente con Sirius, él te entenderá y te apuesto a que va a demostrarte cuanto te quiere, también habla con Harry, tal vez él te puede ayudar con ese asunto — dijo.

Lo pensé y creo que lo mejor era hablar con Sirius, era necesario, así que esa misma noche hablaría con él.

Planee todo, espero que todo salga como quiero, no sabía si algo malo podía pasar, pero de cualquier forma valdría la pena hacerlo. Ya era de noche, fui al comedor, Harry y Sirius estaban hablando ahí.

Me escondí detras de la puerta para poder escuchar lo que decían.

—Me gustaría que pudieras mudarte ahora, seríamos una familia — dijo Sirius.

Te Seguiré Amando  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora