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—¿Puedo entrar? — preguntó Harry.

—Me da igual — dije en un tono frío dejando la puerta abierta.

—Lilian, sé que no somos amigos, te escuché hablar con Sirius — dijo.

—Escuchar conversaciones ajenas es de mala educación, ¿Por qué escuchaste? — pregunté.

—Curiosidad — respondió — en fin, lo que quiero decir es que quiero que me disculpes por hablar mal de ti en segundo año, tal vez nunca me disculpé por ese asunto, no sabía que se alejaron de ti por lo que dije y tampoco lo sospeche; yo era un niño, tenía a penas doce años, no pensaba en las consecuencias de mis actos, lo siento — dijo.

—Sé que tal vez suene a algo malo, pero debiste haberte disculpado antes, ahora yo si te disculpo; sin embargo, necesitas recordar que yo no soy igual con las personas que me hacen algo — dije.

—No quiero que te vayas, Lilian, es mi culpa, debí entender bien que tú eres la hija de Sirius, yo debí dejar que tú y él tuvieran su tiempo, Sirius es como mi única familia; sin embargo, también de ti es tu única familia — suspiró — si te vas harás que Sirius se sienta mal, en realidad él si quiere conocerte.

—No parece — digo para después agarrar la carta que le escribía a mi papá y tirarla a la basura.

—Solo espera, en tres días volveremos a Hogwarts, espera esos tres días, solo eso te pido, por favor — pidió Harry .

—Esta bien, voy a esperar — dije.

—Lilian, se que hice mal, cometí muchos errores y me arrepiento, la única manera en que sabré que me disculpas será si aceptas ser mi amiga — nos quedamos callados un rato y despues el preguntó — ¿amigos?

—Amigos — confirme y sonreí levemente.

—Hay que conocernos ¿no crees? — dijo y yo asentí.

—Pero no ahora — dije.

— ¿Entonces cuando? — preguntó.

—Cuando me sienta mejor — él asintió — quiero estar sola, ¿puedes irte? Por favor — dije.

—Si, ya hablaremos después, hasta mañana, Lilian — dijo y se fue.

Me recosté en mi cama mirando hacia arriba, pensé mucho, no quería saber de Sirius; pero ya le había dicho a Harry que me iba a quedar aqui.

Mañana sería la audiencia en el ministerio, así que no sabíamos si Harry sería expulsado de Hogwarts, lo más posible es que no, tiene a Dumbledore de su lado y obviamente eso hará que Harry siga en el colegio.

*.*.*.

Al siguiente día me levanté algo tarde, no pude ver a Harry irse y no pude desearle suerte, aunque no la necesitaría.

Salí de mi cuarto y ví a un elfo doméstico, quien también volteo a verme con sus ojos grandes, era obvio que era un elfo viejo ya que tenía arrugas, su vestimenta era desgastada y llevaba una expresión de amargura en su rostro.

—Bu-buenos días — saludé y el elfo me miró sorprendido — Soy Lilian Black — hasta tal punto llegue a ser amable.

No debí presentarme, es un elfo, ellos no le responden a los humanos, quien será su amo.

Baje a la cocina con algo de miedo, fue por la impresión de ver a ese elfo.

Me senté a lado de la profesora Potter, ella estaba hablando con el profesor Lupín, se veían algo preocupados; sin embargo, esa preocupación no era por Harry, sino por ellos. Me dí cuenta de eso porque escuché disimuladamente lo que decían.

Te Seguiré Amando  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora