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—Daphne, ¿Qué pasó? — pregunté acercandome a ella.

—Estoy cansada — dijo y se sentó en su cama, sus ojos estaban rojos, había llorado mucho — sabes que yo sufrí por dentro cuando Theo se declaro y yo no pude aceptar eso, nos separamos por un tiempo, yo quería que Theo y yo seamos algo más que amigos; pero tenía miedo a aceptar — respiró hondo — ahora que él y yo fuimos novios, él me engaña, besó a Tracey frente a mi, estoy cansada de luchar por él; quería arreglar las cosas cuando ví señales de que Theo se alejaba, pero no, él beso a Tracey.
»Me engaño, cuando yo intenté cambiar, ya no era  fría e intenté ser más cariñosa para que él estuviera cómodo con nuestra relación — sonrió levemente aún llorando — No sé en qué estoy pensando, no puedo creer que estoy llorando por una estupidez — se limpio las lágrimas.

—Daphne, pero no creo que Theo sea capaz, él te ama y no creo que el hubiera hecho algo así — aunque ni yo sabía que pensar.

—No lo defiendas, por favor — dijo Daphne un poco más calmada — no te estoy prohibiendo que hables con él, es tu amigo, pero no hables de él frente a mi.

—Si está bien, vamos a dormir, mañana no podrás despertar y tienes que estar bien mañana — dije.

—¿A ti qué te pasó? Te ves horrible — dijo.

—Estoy normal, solo Draco, Fred, el TIMOs y mi papá, Tracey, ahora mi amiga sufre por mi amigo. Enserio, eso es tedioso, todo lo que pasó hoy, fue un día horrible; pero me voy a dormir y mañana no me veré horrible — dije y me recosté en mi cama.

Pude dormir bien, me dí cuenta de eso porque a la mañana siguiente me desperté muy tarde. Me vestí rápidamente y me cepille el cabello, pero a pesar del esfuerzo que hice para que mi cabello parezca peinado, no pude hacer nada para arreglar ese desastre.

Baje al gran comedor y me senté en la mesa donde solo tome un jugo de calabaza, casi no había nadie, seguro que la mayoría ya estaba en clase. Corrí al salón de encantamientos, la clase de la profesora Potter, toque la puerta del salón; pero nadie salió, así que insisti tocando la puerta. Hasta que por fin alguien me abrió.

—Señorita Black, ¿Porqué llega tan tarde? — preguntó la profesora Potter.

—Profesora, lo siento, me quedé dormida — admití.

—Esta bien, pasa, pero no debe volver a suceder — entre al salón, el único asiento vacío era a lado de Theo, así que fue algo conveniente sentarme junto a un amigo. En la otra fila, a mi lado estaba Harry y me saludó susurrando.

Me encontraba tomando apuntes de la clase, para poder hacer la tarea más fácil y de repente una nota llegó a mi mesa.

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Lilian, ¿podemos hablar cuando termine la clase? por favor
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La nota era de Harry, respondí "está bien" en el mismo papel y se lo pase.

Seguí atendiendo a la clase. A pesar de que por primera vez esta materia se volvió aburrida para mí. Me sentía cansada y ni siquiera había razón para estar cansada. Al terminar la clase, salí con Harry, para que hablemos de lo que sea que él quería hablar.

—Quería proponerte algo, sé que ya es muy tarde para esto, por qué en dos meses ya serán las vacaciones y yo ya había comenzado con esto antes — dijo algo nervioso, tratando de explicar bien lo que quería decirme — dude un poco de invitarte a esto, pero yo creo que lo mejor es que estés con nosotros, así que quiero que te inscribas al Ejército de Dumbledore, por favor.

—¿Qué es eso? — pregunté confundida.

—Solo son estudiantes que les interesa aprender más de lo que aprenden con Umbridge, pero en secreto, ya sabes que ella ya impuso reglas horribles, aunque estos meses te he visto algo distraída, creo que te has perdido de todo lo que está prohibiendo — dijo.

—Si, me perdí de esas cosas, pero he estado algo atenta a algunas cosas — dije — Y respondiendo a tu propuesta de entrar al Ejercito de Dumbledore, si quiero entrar, será lo mejor para mí.

—Que bueno, esta tarde al terminar las clases yo voy a tu sala común y te llevo al salón donde practicamos esa materia ¿De acuerdo? — preguntó.

—De acuerdo — respondí — entonces te veo más tarde, y tengo algo más que decirte.

—Te escucho — dijo.

—Esta bien si algunas veces no voy a esas clases, por favor, es que algunas veces estoy ocupada y tal vez no pueda ir — dije.

—Si, está bien, pero no debes decirle a nadie. Bueno te veo más tarde — se despidió y se fue.

Me fui a mi cuarto, note que en mi cama había un sobre, lo levanté, era la carta que venía con mi castigo. La abrí.

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Lilian, espero que aceptes el castigo, además me dijiste que aceptarías el castigo. Así que el fin de semana irás al salón de pociones, donde hacemos las prácticas y ordenarás todas las cosas en donde deben estar.

También ordenarás el estante que tiene diferentes ingredientes de las pociones, el sábado te esperaré ahí a ti y al señor Malfoy para que trabajen más rápido, ahí les daré todas las instrucciones.

También quería sugerirte que entres a la brigada inquisitorial, es algo preparado por la profesora Umbridge, y si entras tus notas aumentarán, creo que ella busca personas muy específicas, asi que yo creo que tu entrarías con facilidad.

Atte: Severus Snape
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Lo de Draco me molestaba, como pudo darme el castigo con él, aún así debía aceptar, porque esto podría ser peor.

En el punto de entrar a la brigada inquisitorial, pues me llamó la atención así que iré a la oficina de Umbridge para pedirle un puesto.

Salí de mi cuarto decidida a ir directo a la oficina de Umbridge, antes de tocar la puerta respire hondo y toque la puerta.

—Puede pasar — dijo con esa voz tan irritante. De todas formas entre.

—Buenos dias, profesora — saludé.

—¿Qué se le ofrece señorita Black? — preguntó.

—Pues yo... quiero entrar a la brigada inquisitorial — dije.

—Esta bien, primero necesito saber de tus notas, hable mucho con los profesores y cada vez que les digo tu nombre mencionan a una chica distraída, que se duerme en clase o que no atiende, de todas formas dicen que eres su mejor alumna, excepto en herbologia y en tu primer año eras mala en el vuelo en escoba. No tienes nada que resalte en ti, solo una pelea que tuviste anoche, creo que por un chico. A lo que oí y ví eres amiga de Harry Potter que es un chico problemático. Todo lo que acabo de resaltar ahora en mis palabras son cosas malas — se quedó callada — además este año estas de muy malas notas en mi materia. No requiero a una chica distraída e irresponsable, quiero a alguien que sea todo lo contrario a ti; de todas formas gracias por querer apoyarnos — dijo y me sonrió.

—¿Qué?, ¿De qué habla?. Profesora Umbridge, yo soy buena en todas las materias y en Defensa Contra Las Artes Oscuras soy buena, cada año y... — me interrumpió.

—Este año no eres buena, lo siento, ademas no la veo con suficiente autoridad para controlar, ni siendo una prefecta eres autoridad — dijo aún con su sonrisa.

—Profesora, yo... creo que se encuentra equivocada, yo soy buena para un puesto en la brigada inquisitorial — dije.

—Señorita Black, me está cansando, yo no creo que usted sea buena para esto, quiero que se vaya ahora, por favor — dijo y se levantó de su asiento — salga de mi oficina.

Me levanté del asiento y me fui sin decir nada. Estaba enojada, triste, decepcionada; pero no podía destrozarme ahora, debía ser fuerte, después de todo los años de estudio y de esfuerzo para lograr ser más de lo que soy, aún no me siento suficiente para creer que alguien esté orgulloso de mí, aún no he logrado nada, solo buenas notas; es lo único que logré.



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