Yautja Prime

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-El amor, que soberbio es el amor, que envidioso, lujurioso, irritante, malvado, goloso, perezoso y...egoísta que es.

Por suerte,

yo también soy un pecador-

Narrador omnisciente.

En otro lugar, en otro mundo, una reunión de enormes criaturas tomaba lugar. Grandes, fuertes, agiles e inteligentes cazadores, disputaban entre palabras sus ideas.

Los días se habían tornado semanas, las semanas meses, y no podían permitir que los meses se tornaran años, esperando a sus líderes.

El consejo, formado por los más ancianos y sabios, disputaba contra los jóvenes y fuertes guerreros, que buscaban adueñarse del poder. Claro, entre ellos había cazadores con grandes hazañas, pero, los más ancianos sabían reconocer el potencial verdadero, no solo medido por los trofeos.

Una pareja de cazadores encabezaba el tumulto frente al consejo. Un Yautja con tonos verdes como el musgo, tamaño grande y tosco, una enorme cicatriz desde su cadera hasta el pecho y un colmillo menos, gritaba por respuestas, mientras su pareja, una Yautja, del mismo tamaño, colores más claros y con tonos marrón, unos finas cicatrices por todo su cuerpo y las rastas teñidas de finos colores blancos demostrando su edad, lo miraba en silencio, expectante.

Ella espero con paciencia hasta que su pareja dejó de gritar, de vez en cuando, miraba a los ancianos, pero, con un aire de superioridad palpable.

Cuando su acompañante se quedó sin palabras para escupir, ella miró a los ancianos, y por fin dijo se dirigió a ellos.

-Sabio consejo, lo que el cazador Batjel quiere saber, es... ¿Cómo piensan recibir a los yautjas que volverán para la temporada de apareamiento, si no tenemos líder?, ¿Qué dirán las otras tribus?, Se sabe bien que un pueblo, sin la fuerza que haga cumplir nuestro código, no es más que un simple lugar donde cualquiera podría ser un mala sangre. Como hija de esta tribu, temo por el honor de mi gente, y les propongo, que Batjel y yo, Azara, lideremos a partir de ahora. Nuestras hazañas son muchas, y compiten con las de los antiguos líderes desertores, por ello...

Antes de poder terminar, uno de los ancianos cortó el discurso. El mayor de estos, y aquel que había visto casi 500 lunas pasar, habló. Berlok, con un tono severo, pero paciente, no dio más posibilidad de disputa.

Berlok: Azara, le suplico que no haga mención de dicha palabra ante la memoria de los antiguos líderes. Aunque no se encuentren, este es un pueblo civilizado, capaz de cumplir los mandatos de nuestro código, aún sin que se los estén repitiendo como a los pequeños cachorros...-(El anciano se levantó de su lugar, y caminó hasta el frente del tumulto. Todos guardaron silencio, meditando aquellas palabras)- Por ello, se lo pido, noble cazadora, evite difundir ideas sin fundamento para crear disturbio, o usted y su compañero, serán degradados -(Se acercó a ambos yautjas, que los vieron como si los hubieran declarado a muerte)-

Ante la mirada perpleja de los presentes, y algunos jadeos de sorpresa. Berlok miró a su pueblo, a los yautjas enaltecidos que pedían respuestas, los miró como si fueran simples cachorros, no grandes cazadores. Sintió algo de pena, por tener que repetir lo mismo que había repetido tantas veces atrás.

Berlok: Como bien saben todos en esta tribu, y se les informa a los nuevos guerreros, los líderes Krant, Berserk y Kerck, se encuentran desaparecidos, bueno, más específicamente, Berserk y Kerck, desaparecieron sin dejar rastro, del último ataque a un nido xenomorfo. Del joven líder Krant, se encontró el cuerpo casi en su totalidad, pero, destruido por las explosiones y con múltiples heridas de los xenomorfos. Fue una victoria aparente, pues del nido, y las criaturas no quedó rastro, sin embargo, nuestros expertos determinan y persiguen el ligero rastro encontrado 60 soles atrás de la nave hacia un rumbo indefinido pero directo, lo que supone que Berserk y Kerck pueden encontrarse perdidos en un planeta extraño. Como nuestras normas lo indican, mientras no exista prueba de que los líderes estén muertos, y sin existir aún Yautja que haya liderado dicha proeza de acabar con un nido rojo de Xenomorfos, el solicitar su reemplazo no es más que un insulto a nuestro código...-(Su tono fue intenso y muy brusco, pareció por un momento regañarlos a todos)-

La Deuda de un Predador  (Depredador x Lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora