Ice Heart ❊ ⤑ Uchiha Sasuke.

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ˏˋ°•*⁀➷ Capítulo 003༉‧₊˚.

Había acabado su entrenamiento como de costumbre. Esta vez entrenó solo toda la semana, Kabuto solo le planteaba la teoría y él debía volverla física y enseñársela cuando lo consiguiera, para que cuando cumpliera el mes, Orochimaru lo evaluara. Salió del campo de entrenamiento y se dirigió a su habitación para ducharse. Era casi media noche y no tenía sueño, por lo que después de asearse, decidió recorrer la guarida. Llevaba un mes con Orochimaru y no había tenido tiempo para conocer el lugar, en parte porque lo creía innecesario ya que para él solo era importante entrenar y recorrer la guarida solo le retrasaría en sus deberes.

El lugar era enorme y estaba diseñado en forma de interminables laberintos que podrían confundir a cualquiera que no conociera el lugar. Era simple y poco iluminado, había una sección de prisioneros mal cuidados, otra zona era de laboratorios a la cual solo tenía acceso Orochimaru y Kabuto. La guarida tenía dos alas de entrenamiento, el ala oeste y la del este, como él entrenaba en el ala este, no iría allí al ya conocerla perfectamente, por lo que se dirigió a la otra.

Una vez ingresó a la sección de salones de entrenamiento del ala oeste, sintió el frío helarle los huesos, supuso que ella estaba allí, pero le sorprendió que siguiera entrenando hasta altas horas de la noche. Pasó por dos campos de entrenamientos y notó que cada uno estaba destrozado de diferente manera; el primero había sido arrasado por lo que parecía ser agua, mientras que el otro había sido demolido por algo similar a un tornado, dos naturalezas de Chakra completamente distintas, pero que unificadas formaban el Kekkei Genkai de Hielo.

Escuchó el sonido de un cristal al romperse y se dirigió al lugar de donde provenía. El frio se concentraba en mayor parte en ese lugar casi que haciéndole temblar por las bajas temperaturas. Llegó al último campo de entrenamiento del ala oeste y se encontró con la escena de un subordinado de Orochimaru el cual tenía la marca de maldición activada, siendo consumido por un gran tornado de nieve y cuchillas de hielo. Megumi estaba a unos metros, envuelta por una gran cantidad de polvo escarchado que giraba violentamente a su alrededor, la última vez que la vio, la escarcha era sutil y le daba una apariencia angelical, pero así parecía el vil demonio de las nieves. El hielo bajo sus pies ya no era una capa fina de algunos centímetros, ahora cubría completamente el suelo y se notaba el gran grosor de este, llegando a cubrir hasta las paredes del salón. Sus largos y lacios cabellos blancos revoloteaban ferozmente, dándole un ambiente exótico.

Sasuke permaneció a una distancia prudente, cubriéndose por las paredes de la entrada/salida, mientras observaba con atención como se desarrollaba la situación. La niña era muy habilidosa, pero todavía le costaba controlar su Kekkei Genkai y eso de seguro sería un trabajo demasiado duro. Sasuke vio como el tornado con cuchillas de hielo que rodeaba al ninja con la marca de maldición, se desvanecía poco a poco, dejando ver al muchacho de rodillas y con la ropa hecha jirones. Poco a poco la pequeña tormenta de escarcha se fue apaciguando y solo quedaba lo habitual.

De repente una risita se escuchó. – Lamento eso. – Era Megumi quien le extendía su mano a su contrincante. Él la observó por unos segundos para luego sonreír y tomarla.

- Ya me he acostumbrado y usted ha mejorado mucho en su control, señorita Megumi. – El muchacho que era unos años mayor que ella se sacudió sus ropajes llenos de nieve y hielo. – Ya no me hace atravesar diez paredes gruesas de hielo solo por accidente.

- Orochimaru me ha dado nuevos trucos para regular la fuerza de mi Chakra. – Sasuke dedujo que ya había acabado la confrontación, por lo que se apresuró a seguir con su camino, con la intención de que no le vieran.

Llegó a su habitación luego de algunos minutos y cuando pensaba ingresar a esta, un frío recorrió su espalda. Volvió su mirada hacia atrás y se encontró a Megumi sonriéndole dulcemente.