La batalla final.

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Corríamos en la dirección donde teníamos que proteger a los demás y evacuarlos. Steve me había puesto al tanto de todo. Valla, quien diría que los gemelos se nos unirían. Yo no podía dejar de pensar en ese momento, ese beso tan único y especial. Esas cosas maravillosas tan inexplicables y gratificantes me hacían saber que seguir viviendo valía la pena.


Me mentalice, esta ves peleábamos contra un robot con mente propia que se innovaba cada cinco minutos, que tiene acceso a la red global, puede moverse de un cuerpo a otro cuando se le da la gana y para colmo lo crearon Tony Stark y Bruce Banner.


Perfecto .


Recargo todas mis armas y activo el traje. Las líneas son de un color azul eléctrico. Las líneas se volverán rojas cuando yo lance una descarga de cantidad descomunal.


La protección ante todo.


Steve me hace unas señas con las manos y me da algunas indicaciones. Me tengo que dirigir a una zona en especifico y despejarla lo más posible. Le asiento y sonrió. Justo cuando pienso salir corriendo el me toma por el codo y me voltea.


Se acerca rápidamente y me planta un beso en los labios. Un beso que fue fugaz pero hermoso. No fue tan profundo como el anterior pero aun así fue mágico, único, especial.


-Nuestro tercer beso... -pronunció el con una de sus perfectas sonrisas.


-Am, bueno, en realidad es el cuarto... -dije yo desviando la mirada.


Su cara de estupefacción fue tal que parecía un bebé sin entender nada.


-¿Qué dices?


Yo solo me hice la sorda y silbe despistada.


-Si bueno, ya oíste, luego te explico, hasta luego chico -le dije mientras me zafaba de su dulce amarre y salía corriendo. 


El plan : Destruir a la mayor cantidad de Ultrons posible.


Llegue al punto que me indico Steve y empecé a usar las varas electro estáticas moviendolos ágilmente con combinados ataques corporales. Clint hablaba por el intercomunicador y su área estaba despejada y Wanda... ya era una vengadora.


Aniquile a unos varios Ultrons y saque a unas personas hacia un lugar un poco más seguro de donde estaban y todavía faltaban una docena más por resguardar. Esto era un completo caos.


Personas heridas, llorando, gritando, pidiendo auxilio. Pidiendo ser salvados.


Yo realmente no podía. Justo cuando había recogido a una familia y la puse en un edificio alejado más seguro, sentí como una puñalada en la espalda , me di la vuelta y un Ultron me había disparado una bala, pero no se sentía como un balazo sino como si me hubieran enterrado un cuchillo. Lo malo era que me había dado en el esternón, lo atravesó. Pero había dado justo en donde se cruzaban la vena y el nervio superior y llegaban a la carótida.

No estaba en mis planes (En Reedición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora