Si te lo digo no me dejes.

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Holass  chicas ♡

No me maten /.\ Se que tarde... DEMASIADO en actualizar pero es que realmente estaba con una vagancia extrema-literalmente- escribia una oración por dia y tal vez al otro dia la borraba porque no me gustaba y volvia a escribirla y bla bla bla

En fin perdón u.u

Las tengo muy descuidadas :c me disculpo por eso también

◇◆◇◆

PDV de Clara.

Esto era increíble, mi mejor amiga no apoyaba mis decisiones. Es mi bebé y no puedo con él en este momento, es absurdo, una chica de casi dieciocho con un bebé,  absurdo. Totalmente absurdo y descabellado. ¿Que diría la gente en la calle? ¿Que dirian mis padres?¿Los padres de Nahuel? ¡¿Que diria Nahuel si se entera?! No, no, no, él no puede enterarse. Jamás deberá enterarse. Me estoy arrepintiendo de haberle contado a Valeria ¿y si ella le decia algo? No,no eso no podia pasar. Quiero confiar en que no me delatara.

- Bebé...- dijo mi novio y pegue un respingo,me relaje al darme cuenta que solo me estaba llamando. 

- ¿si...?-pregunte sin dejar de cortar las verduras para la sopa.

- ¿Podrias venir un segundo?- deje la cuchilla y me fui a la sala donde supuse que estaba.

-¿Que pasa?- me sente a su lado en el sillón.

La tele estaba silenciada, se podían ver los jugadores de fútbol corriendo por la cancha, uno festejaba al haber metido un gol pero mi novio encontraba mas interesante mirar mi estómago. Me removi incómoda pensando en que él ya lo sepa, pero no,  no era posible.
Tomo mis manos entre las suyas y las apreto ligeramente, me miro directamente a los ojos poniendome cada vez más incómoda, esos ojos siempre me pusieron nerviosa y los pelos de punta, lograba que con su leve tacto yo me derritiera y él lo sabia, lo sabia tan bien que solia aprovecharse de eso. Sujeto mi barbilla para que no pudiera dejar de mirarlo a los ojos.

- ¿Soy padre no es asi? -pregunto con los ojos brillosos y yo me largue a llorar.

No podia creer que valeria me haya delatado de esa forma.

- Si te lo digo no me dejes- solloce, él tenia sus ojos clavados en mi- Estoy embarazada.

- ¿Y por que lloras?¿Tienes miedo? No importa mi amor, aprenderemos juntos-me dijo tan sereno.

-Voy a abortar Nahuel- dije sería limpiandome mis lágrimas.

- No harás eso- dijo rompiendo todo contacto.

- Claro que lo haré, es mi bebé.

- Pero también es mio ¿o acaso olvidas que los bebés se hacen de a dos?- farullo.

- Cuando tu debas cargarlo nueve meses hablamos Nahuel.- dije enfadada encerrandome en nuestro cuarto.

- Abre la puerta, no te encierres- dijo dando grandes golpes.

-¡NO, VETE!-grite.

-No me ire princesa. - escuche como se sentaba.-¿ por qué no quieres tenerlo?- insistió.

¿Por qué no queria? Mi mayor miedo no paso... él no me dejo, quiere al bebé. ¿Que es lo que realmente me pasa?.

-Tienes miedo,miedo a la responsabilidad, miedo al embarazo, miedo al parto.-susurro una voz dentro de mi cabeza.

Negué tratando de ahogar mis sollozos.  Soy alguien valiente. No debo tener miedo a nada, no puedo tener miedo a nada.

-Eres valiente... Pero ser valiente no implica no tener miedo.

Queria gritar y asi lo hice, grite frustrada, grite enojada,grite triste pero no grite derrotada.

- CLARA ABRE LA PUERTA ¿QUE CARAJO PASA?¿POR QUE GRITAS?- pregunto desesperado tratando de abrir la puerta a patadas.

Deje de escuchar los golpes y con el ceño fruncido me levante a abrir la puerta, para cuando la abri vi a Nahuel corriendo hacia la puerta ahora abierta, sus ojos se abrieron como platos tratande de frenar y yo no pude correrme, terminando con el sobre mi.

Quede atrapada entre el suelo y su cuerpo, tenia apoyados sus codos uno a cada lado de mi cuerpo para no aplastarme, nos miramos a los ojos y un silencio abrazador nos inundó, sus ojos estaban más oscuros que de costumbre,estaban aguados. Y el solo hecho de pensar que por mi culpa estaba mal me encogía el corazón. Como acto reflejo le di un corto beso en los labios, él se me quedo mirando confundido para luego besarme más apasionado, se apoyo en un brazo mientras que con el otro acariciaba mi vientre, escalofríos recorrieron mi columna. 

- Quiero tener el bebé- susurro sobre mis labios

- ¿pero y tus padres?- prengunte incorporandome.

-¿Que con ellos?

-¿Como que con ellos? Son tus padres... creerán que soy una cualquiera- dije sollozando.

- Mis padres te conocen, mi padre te adora, mi mamá... bueno, dale tiempo- dijo haciendo una mueca- y aunque te creyeran una cualquiera... mi trabajo será recordarles que un bebé se hace de a dos.- dio un pequeño beso en mis labios- te amo, ya me imagino nuestro bebé,con tus ojos hermosos y tu sonrisa... ¿Lo conservaremos?

- Lo dices como si me dieras otra opción...

-Siempre quise una familia...hijos, nietos y créeme que tenerla contigo es algo tan... perfecto- mis ojos se cristalizaron. Me abrace a él escondiendo cara en su cuello.

Se separo de golpe y comenzó a oler el ambiente con el ceño fruncido

-¿Que?- pregunte.

- hay un olor como a...- volvió a oler dejando la frase en el aire, entonces busque el aroma yo también. Me levante de un jodido salto al darme cuenta de donde venia el olor; la jodida cocina.

- ¡LA COMIDA! -grite mientras corría hacia esta y escuchaba las risas de mi novio desde la habitación.

No te quieroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora