Chloe
Nos miramos hasta que termina la canción y aparto la mirada con enojo, idiota.
Todavía tiene el descaro de mirarme después que dejo claro que primero se comía a un perro muerto que tener algo que ver conmigo, pues que valla a mirar un perro muerto o a Alexia.¡pero a mí, que no me mire!
El muy idiota ha cambiado demasiado, ahora es más alto, es un gigante a mi lado, su cabello luce desordenado como siempre lo llevaba, los músculos se notan bajo su playera, los pantalones y las botas lo hacen ver tan sexi que sin duda seria el tipo de hombre al que me llevaría a la cama. Y su rostro atractivo que tan solo verlo babeas, su mandíbula completamente marcada lo hace ver mucho más atractivo, debería ser un pecado ser tan guapo como el.
Pero a pesar de que tango ganas de ir y decirle lo bueno que esta y proponerle ir a buscar una habitación y descubrir todo lo que ay debajo de su atuendo sexi, decido ignorarlo y no hablarle, soy demasiado orgullosa para dejar atrás lo que pasó.
Es un idiota. Me dan ganas de ir y darle la bofetada que tengo debí darle desde hace años, pero no voy a perder parte de mi dignidad por eso.
Desde lejos lo observo con Alejandro y un grupito en el que esta la odiosa de Alexia, ella se le bota encima y el la recibe encantado. No sería una sorpresa si resultara que se han visto durante todo este tiempo que no supinos nada de la vida del otro, son tal para cual, después del abrazo más cariñoso de lo normal saluda a los demás y empiezan a hablar, ella encantada va por una bebida para él. Cuando pasa cerca de mí me mira con un ápice de superioridad, estúpida, por mi como si lo mete en su escote operado y se lo lleva.
Trato de ignorar su molesta presencia, pero no puedo, maldita sea, ¡porque tenía que venir!
-¿Chloe que te pasa?
-¿Ehh?
-¡Que te pasa! Estas como pérdida. - ¿tan estúpida parezco aquí mirándolo?
-Nada estoy bien.
-Si estuvieras bien no te preguntaría ¿Qué pasó? -me conoce tan bien que no le puedo mentir.
- A llegado el idiota. - confieso sabiendo que no tardara en darse cuenta de su presencia.
-Ohhh... - se quedó sin palabras.
-Estaba bailando y se me quedo mirando el muy idiota, ¡no tiene vergüenza!, lo mire mal y fui por algo de tomar y aquí estoy, viendo como la estúpida de Alexia está pegada como una lapa a él.
-Así que esta celosa...
-¡Yo no estoy celosa de nadie! - ¿O sí?
-ok... Pero tranquila, disfruta de la noche y que no te la eche a perder, baila y pásala bien.
-Tienes razón.
Entonces me voy por otro trago y regreso a la pista a bailar, no voy a dejar que absolutamente nadie me arruine la noche, varios de mis excompañeros se acercan a invitarme a bailar y acepto encantada -bueno solo los solteros porque no quiero problemas con esposas celosas - ellas no están pero las paredes ven y oyen.
La noche sigue avanzando y varios ya se están retirando -bueno madamas los que tienes pareja e hijos - se despiden y se van porque en su casa los esperan.
Qué bonito ha de ser que te esperen en casa.
"¿Te vas a ponerte sentimental?"
No, claro que no.
Entonces ya quedamos puros solteros sin compromisos, somos menos de la mitad, pero sigo bailando hasta que me canso y necesito otro trago más.
A este paso voy a terminar borracha y ahogada en la alberca, pero no me importa, camino hacia la barra y pido un vaso de whisky, ya sé que es demasiado, pero es lo que quiero, además yo sé que Andy cuidara de mi si me paso muchoooo de copas.
Me recargo en la barra y espero mi bebida y cuando me entregan lo que pedí y me doy la vuelta para irme me choco con alguien derramando toda mi bebida en el suelo, lo bueno es que no me mojé.
-¡¿Que no te fijas en donde pidas?! -le reclamo, esta ciego o que.
- Perdón no sabía que darías la vuelta, no fue a adrede.
¿Con todas las personas con alas que me tenía que chocar tenía que ser precisamente el?
-¡Eso dices! Pero pudiste ocasionar un accidente por no pensar.
-Te he dicho que no fue al propósito.
-¡Pues para la otra fíjate donde caminas! - la rabia toma control de mí y no estoy interesada en calmarme.
-Ya te he pedido disculpas no es necesario que te pongas así. - musita con indignación.
-Pues quédate con tus disculpas, no las necesito. ¡Y quítate de mi camino, no me estorbes! - digo empujándolo hacia un lado para salir de esta pequeña discusión que he montado
-Creo que estas exagerado, no fue para tanto. - trata de retenerme, pero me niego a intercambiar mas palabras con este hombre.
¿Exagerando yoo? Él es un idiota, ¿cómo no desaparece de este planeta? todo seria más fácil.
-A pesar de que vienes y me tiras la bebida todavía te atreves a decirme exagerada, ¡Como se ve que no conoces la vergüenza!
-Pues si no te gusta lo que dije, agarra y veté. - contesta altanero.
-¡Eres un estúpido e idiota sin vergüenza!
-¿Y me lo vienes a decir tú? -me dice con una sonrisa de descaro.
Aghhh lo odio.
-¡¡Idiota y mil bese idiota, púdrete!!
Y me doy la vuelta y me voy, maldito Dareck Allen, compadezco a su madre por soportarlo.
Enfurecida voy directamente al baño a mojarme la cara, de seguro he de estar roja del coraje, estúpido.
Voy a entrar al baño y me encuentro con Andy.
-¡¿Que te paso, estas más roja que el jitomate!? - la curiosidad y preocupación aparecen en su cara.
Como le explico que me choque con el estúpido idiota de Dareck y nos pusimos a discutir -más bien yo me puse a discutir -y el idiota me hizo enojar y vine a tranquilizarme porque tengo ganas de ir y de terminar con el lentamente sin piedad alguna.
-Discutí con alguien. -le digo sin más detalles.
-¿Con quién?
-Con nadie importante.
-¿Segura?
-Si, quiero lavarme la cara y tranquilizarme.
-Está bien, te espero y vamos a bailar.
-Vale.
Me acerco al espejo y miro mi reflejo, definitivamente estoy más roja que un tomate, esto solo pasa cuando me enojo demasiado y esta vez he llegado a mi límite.
Me echó un poco de agua y miro mi reflejo nuevamente, estoy menos roja. Trato de retocar mi maquillaje para que no parezca que he estado en una pelea callejera.
Ya que me veo decente salgo para irme con Andy.
-Ya estoy, podemos ira a seguir disfrutando de la fiesta.
-Esa es la actitud.
Y caminamos hacia la pista de baile, en el camino nos Encontramos a Alejandro.
-Hola chicas guapas ¿Les gustaría bailar con este hombre guapo? - nos dice moviendo sus cejas provocativamente.
-¿Y podrás con las dos tu solo? - le pregunto.
-¿Desconfía de mis habilidades bella dama?-me dice con indignación fingida - Les prometo que si aceptan no se arrepentirán ¿Entonces que dicen?
-¡Aceptamos! - decimos las dos al mismo tiempo.
Nos ofrece un brazo a cada quien y lo tomamos y seguimos nuestro camino hacia la pista de baile .
Nos lleva y nos para en el centro de la pista y él se va a decirle algo al DJ ¿Ahora que va a hacer?
Después de pedir quien sabe que, regresa con una enorme sonrisa plasmada en su cara.
Entonces se para frente a nosotras.
-¿Están listas para para darlo todo en la pista? - no puede ocultar su emoción.
-¡Claro que sí! - dice Andy.
Yo solo asiento con una sonrisa.
Entonces empieza a sonar esa canción que reconocería en cualquier parte.
Macarena.
Alejandro empieza a bailar y nosotras no tardamos en seguirle el ritmo. Esta canción es tan pegadiza que no te puedes resistir a bailarla, algunas - digo algunas porque prácticamente ya somos bien pocos, -se unen al baile y disfrutamos del momento y me olvido de completamente todo.
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EL OLOR DE TU PERFUME ©
RomanceAlgunos le llaman destino y otros prefieren creer que es casualidad. Pero al final, la historia siempre termina igual. ¿Bien o mal?, no lo podemos saber. Un reencuentro de excompañeros. Alcohol. Musica. Amores del pasado. Y unas cuantas copas de más...