Dareck
Estoy de camino a casa de mis padres para pasar el fin de semana con ellos.
No llevo nada más que mi teléfono y portátil.
Tengo todo lo que pueda necesitar en su casa, y nada más será una noche y un día.
Mañana regresare en la tarde a mi casa porque el lunes vuelvo a mi rutina de siempre.Seguir siendo el mejor abogado.
Llegó estaciono el auto y entro a casa y hay esta mi hermosa madre cantando mientras cocina con papá.
A pesar de no tener la necesidad de hacerlo, le gusta, esos eran unos de mis momentos favoritos cuando pasábamos los fines de semana juntos, y yo todavía vivía aquí, los tres bailábamos y cocinábamos, al final los tres nos sentábamos a comer entre risas.
Amo a mis padres, a mi mamá también a pesar de sus constantes regaños y líos en lo que me mete.
—Buenas noches. — les hago saber de mi presencia.
Cuando escucha mi voz deja lo que está haciendo y se apresura a venir y abrazarme con sus típicos abrazos de oso. Mi papá sonríe.
—¡Por fin has llegado cariño! Te estábamos esperando. — dice rompiendo nuestro abrazo.
Me acerco a mi padre y le doy un abrazo, después el sigue picando lo que sea que le haya perdido mi mamá.
—¡Y como ya estás aquí ¿Qué te parece si hacemos los tres la cena? Como en los viejos tiempos!
Asiento encantado, mi mamá me pone un delantal y nos ponemos a trabajar.
Reímos de algunas cosas que cuenta papá, mamá nos cuanta de sus amigas y como no ¡Lo guapas que están sus hijas! Hago como si no oyera y sigo a lo mío.
Yo le cuento de mi trabajo, los casos que tenido últimamente y me escuchan atentamente y me dan sus opiniones, algo que aprecio demasiado.
Papá era el que estaba al frente del buffet antes de pasarme el cargo, mamá trabajaba con él y por lo tanto ambos entienden perfectamente de lo que habló.
Ambos son abogados, mamá trabajaba en un buffet distinto, un día ambos peleaban por un caso que obviamente mi madre ganó, papá estaba más impresionado que molesto, aquella guapa mujer le había ganado de una manera increíble, así que según el decidió que la tenía que tener en su buffet, le costó lograrlo meses completos, pero al final aquella mujer audaz acepto, así que empezaron a trabajar juntos, todo empezó con trabajo después una amistad y al final los dos terminaron complacerme enamorados, se casaron meses después y me tuvieron a mí, fruto de su amor, mamá un mujer valiente e independiente no quiso dejar de trabajar así que lo siguió haciendo, razón por la cual no tuve hermanos, pero estoy bien así, no me quejo.
Y pues ahora los dos viven tranquilamente mientras yo dirijo el buffet y la verdad es que me encanta mi trabajo.
Ambos me visitan de vez en cuando para comprobar así que todo está de maravilla, excepto a que mi madre está empeñada en qué formalice una relación. La amó con toda mi alma pero abecés me saca de quicio.Pero debo reconocer que su empeño se ha redoblado con la hija de su nueva amiga.
Ya se le pasara...espero,
Ya que la cena esta lista nos sentamos los tres en la mesa para disfrutar de las delicias que hemos he hecho.
Además yo he preparado una fresas con crema deliciosas. Es un gran logro ya qué no puede hacer ningún otro postre que no sea ese. La repostería no es mi fuerte,
Estoy comieron y no me pasa desapercibido las miradas de mi madre, la conozco perfectamente y sé que me quiere decir algo y no sabe cómo. Ruego que no sea otra de sus tonterías.
—¿Que pasa mamá? — pregunto para que me diga de una vez por todas que ha hecho está vez.
—Nada cariño ¿Porque? — papá sonríe porque sabe perfectamente al igual que yo que trama algo y no sabe cómo decirlo.
—¿Mama...?
—umm...
—Dime lo que me tengas que decir.
—¿Seguro? — así que es algo que me va a molestar.
—Si.
Da un pequeño suspiro y empieza a hablar.
—¿Te acuerdas de Mandy?
—Sí, la señora con la que cenamos hace semanas. — como no acordarse si estaba dispuesta a juntarme con la hija de su amiga sí o sí. Hija que me llego a causar curiosidad y que no llego.
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EL OLOR DE TU PERFUME ©
RomanceAlgunos le llaman destino y otros prefieren creer que es casualidad. Pero al final, la historia siempre termina igual. ¿Bien o mal?, no lo podemos saber. Un reencuentro de excompañeros. Alcohol. Musica. Amores del pasado. Y unas cuantas copas de más...