Halloween, el momento en que las fiestas aparecen en cada rincón y cómo no, la jovén y linda Robbins hará su magnífica celebración anual. Por lo general, nunca recibo una invitación para este tipo de cosas, pero las cosas han cambiado.
El viernes, la mismísima Arizona dejó una en mi pupitre y me sonrió.
—Espero verte mañana —guiñó su ojo y siguió.
Me giré a mirar a Mark con mi boca abierta, le sonreí maravillada, él hizo lo mismo. Aunque el ojiazul es verdaderamente popular, nunca ha ido a fiestas dónde no soy bienvenida, lo hemos dejado como una regla, una que creó él, me pareció bien.
Decidí que debía verme bien para mi primera fiesta de halloween y ¿qué mejor que ir de diabla?
Conseguí un pequeño vestido rojo que llegaba hasta mis muslos, unos cuernos y una cola del mismo color, pero los zapatos altos nunca fueron lo mío, así que simplemente me puse mis converse rojas.
Mark pasó por mí, me despedí de mi padre y salí.
—Te ves sexy morena —bromeó.
—Gracias ángel —sonreí.
Si, teníamos disfraces a juego. Somos mejores amigos desde niños, debíamos hacerlo, eso me causaba emoción.
Al llegar al lugar, la casa ya estaba llena de gente, respiré profundamente y salí del auto, sintiendo las miradas sobre mí. Debe ser extraño verme en una fiesta y vestida así.
—Miren a quién me he encontrado, parece que el diablo está caliente —susurró la rubia detrás de mí.
Ella compartía su disfraz con Dann, claro que sí. Arizona era la caperucita roja, con un diminuto (realmente pequeño) vestido y su novio era el lobo.
Original.
—¿Te has escapado de tu abuela? —sonreí siguiendo la broma. — ¿Dónde están tus amigas por cierto?
Ella negó entre risas. Era increíblemente hermosa.
—Ni siquiera quieres saberlo —susurró cerca de mí.
—¡Arizona! —gritó April.
Tuve que tragarme la risa cuando vi que la pelirroja y Amelia estaban disfrazadas de conos de tránsito.
—¡Este puto traje tapa mis atributos! —gritó Amelia.
—Les dije que podrían quitárselos cuando hablen con Calliope —les sonrió.
Ambas me miraron apenadas.
—Lamentamos lo del otro día —dijeron al unísono.
Una carcajada salió de mi boca.
—Todo está bien, créanme, ahora quitense eso antes de que mi pulmón salga por mi boca —limpié mis lágrimas.
La rubia rio al igual que yo. Ambas amigas se fueron casi corriendo solo para quitarse esa mierda.
—Eres mala —le sonreí.
—Tenía que hacerlo, te lo debían —acarició mi brazo. —Iré a bailar, ¿vienes?
Asentí y la seguí. A diferencia de mí, Dann dijo algo en el oído de la rubia, esta asintió y él salió prácticamente corriendo con una sonrisa.
—Ven —Arizona tomó mi mano y me hizo girar, comenzando así una danza bastante cerca.
"Tú tomas las decisiones, nena
You call the shots, babe
solo quiero ser tuyo
I just wanna be yours
Secretos que he guardado en mi corazón
Secrets I have held in my heart
Son más difíciles de ocultar de lo que pensaba.
Are harder to hide than I thought
Quizás solo quiero ser tuya
Maybe I just wanna be yours"Con el pasar del tiempo, y con más alcohol en sangre, decidí ir al baño.
—En un segundo vuelvo, debo orinar —reí y me escapé.
No recordaba dónde estaba el baño, por lo que abrí una de las puertas sin pensarlo, allí encontré algo que prefería jamás haber visto.
La cara de pánico de Dann lo delató, si no hubiera girado su cabeza hacia mí de seguro no sabría quién era. Pero lo hizo y en todo lo que podía pensar era; "Pobre rubia"
Su maldito novio estaba engañándola, pero con un chico.
Cerré la puerta rápidamente y corrí escaleras abajo. No sabía qué pensar, ni qué decir o cómo, solo quería salir de allí.
Arizona se cruzó en mi camino con una sonrisa, la cual se desvaneció al verme. Ni siquiera podía mirarla a los ojos, me disculpé y salí de esa casa lo más rápido que pude.
Sentí los gritos de la rubia detrás de mí, luego los de Dann, me giré apenas y los vi pelear. Arizona tapaba su rostro con sus manos y su novio parecía pedirle disculpas.
No quiero ser partícipe de esto, pero mañana sé que debo decírselo.
Le envié un mensaje a Mark diciéndole que debía irme, que no me sentía bien. Al instante él se apareció para llevarme a casa, dejó su chaqueta blanca sobre mis hombros y me subió al auto.
Todo estaba en silencio, no quería hablar sobre lo que había visto y Mark decidió no preguntar...
"Caí por ti como cae el agua
I fell for you like water
Del cielo de febrero
Falls from the February sky
Pero ahora la corriente es más fuerte
But now the current's stronger
No, no podría salir aunque lo intentara
No, I couldn't get out if I tried
Pero me convenciste, cariño
But you convinced me, baby"Al día siguiente, me levanté temprano. Quería tocar un poco el piano y sentirme más segura de lo que iba a decir o hacer.
Comencé a tararear una canción que tenía en mente hace un par de días, sentí una presencia detrás de mí, no podría ser mi padre, él estaba en el trabajo.
Me giré lentamente hasta ver a la rubia recostada sobre mi pared, llevaba una diminuta sonrisa en sus labios.
—La verdad es que no tocas nada mal —se sentó en mi cama de piernas cruzadas. —Tu empleada me abrió, por cierto.
—Y-yo... ¿Qué haces aquí?
—Vine a preguntarte qué sucedió ayer.
—¿Dann no te lo dijo? —maldito.
Ella negó. Suspiré pesadamente.
—Lamento mucho que yo deba decírtelo, pensé que tenías una relación "perfecta".
—¿Se lo has dicho a alguien?
Negué confundida.
—Anoche, busqué el baño, no recordaba la estructura de tu casa, por lo que abrí una de las muchas puertas y me encontré dos hombres besándose... Lo que más me molestó es que fuera Dann, tu novio, en tu cama —negué molesta. —No sé ni siquiera cómo mirarte a la cara sin sentir que te estoy lastimando, aunque no es mi culpa.
Levanté mi mirada para encontrarme con sus ojos, lo que más me sorprendió era que Arizona estaba completamente tranquila, algo inesperado en ella.
—Puedo explicártelo —se acercó a mí.
—¿Vas a decirme que tienen una relación abierta solo para protegerlo? Tú no mereces eso... —tomé su mano.
—Bueno, ese era mi plan base —rio nerviosa. —Veo que no puedo mentirte.
—Mira, se que debe ser horrible que te engañen con un chico, Dann de seguro es gay y no tuvo lo que se necesita para decírtelo. Estoy segura de que solo quiere la popularidad que tú puedes darle, pero no debes dejarte pisotear por eso...
—Yo sé que Dann es gay, lo sé desde que tenemos 12, cuando lo encontré besándose con mi primo lejano —me interrumpió dejándome helada.
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Blondie
Fanfic"Sobre todo, te odio porque pienso en ti. A menudo. Es repulsivo, pero no puedo evitarlo." - El príncipe cruel.