Calliope
Había pasado una semana, Arizona no contestaba mis mensajes, se la pasaba pegada a Carina, la razón por la que sus amigas ya ni siquiera le dirigían la palabra.Volvió a ser una perra con el resto del mundo, con la única diferencia de que ella ya no era la abeja reina, sino una simple seguidora de la italiana y sus amigos.
Eran las nuevas serpientes del instituto.
Por otra parte, Erica había vuelto al colegio, pasaba bastante tiempo con la rubia. Nos divertíamos, salíamos de fiesta y... bueno, nos besábamos.
Amelia se acercó a mi lado y me señaló con la mirada la entrada.
El grupo de Arizona y Carina caminaba por la escuela como jodidas estrellas de cine, ambas habían cambiado su look. La rubia llevaba unas pantimedias negras ligeramente rotas, una falda de jean a combinación y una camiseta sin mangas que dejaba ver su sostén rojo. Sus ojos estaban delineados con negro, pero lo que claramente llamaba más la atención eran las puntas de su cabello pintadas de rosa.
—Tu ex está caliente —dijo Erica a mi lado.
—Callate —susurré. —Solo quiere mostrarse rebelde.
Arizona pasó por nuestro lado y me miró de reojo, Carina tomó su mano y la obligó a seguir su paso.
—¿Nos saltaremos la primera clase? —escuché a la italiana.
—Claro —contestó Arizona.
Esa misma noche, Jo había organizado una fiesta y había invitado a toda la escuela. Erica fue a casa para que pudiéramos arreglarnos e ir. Elegí un vestido azul que se apegaba a mis curvas, junto con mis Convers negras. La rubia también estaba linda.
Al llegar a la fiesta, Arizona ya estaba allí con Carina, apenas la vi, sentí como mi mandíbula se aflojó y mi boca se entreabrió. Llevaba una falda negra ajustada a su cuerpo con una camiseta corta y unas botas negras que llegaban hasta sus rodillas. Su cabello caía con ondas sobre su espalda.
Realmente se le veía un gran trasero.
—Necesitas dejar de mirar su trasero —susurró Mark en mi oído. —Erica podría verte —rió.
Balbuceé algunas tonterías, pero al final asentí.
Decidí dejar de darle tanta atención y disfrutar el evento, bailé un poco y bebí bastante.
Erica me tomó por la cintura mientras yo estaba en la mesa armando un trago. Besó mi hombro y susurró algunas palabras en mi oído, a lo que yo contesté con una risa tímida.
Una melena rubia se acercó a la esquina y tomó algunas bebidas. Los ojos de Arizona chocaron con los míos y rápidamente despegó su mirada.
—Arizona, ¿verdad? —preguntó Erica.
—Yup —se limitó a decir.
—Debo decir que admiro la manera en la que te maquillas, yo no podría. Odio tener tantos productos en mi rostro solo para verme linda —¿ese fue un comentario pasivo-agresivo?
Oh no.
—Oh cariño —rió la rubia. —Solo tengo sombra de ojos, no necesito maquillaje para verme linda, pero, al parecer —la observó de arriba a abajo— Otras mujeres si, quizás puedas buscar algunos tutoriales en internet para quitarte la cara de estúpida —sonrió maliciosamente y se retiró.
—Tu ex es una perra —dijo entre dientes.
—Tú empezaste —le reproché. —Ella no se dejará molestar, tenlo en cuenta para la próxima.
Salí hacia el jardín junto con mis amigos, seguimos la fiesta allí. Observé de reojo a Arizona sosteniendo un cigarrillo bastante extraño, lo que terminó de prender mis alarmas fue cuando Carina se la llevó a rastras hacia una habitación
—Ve —dijo Mark. —Haz lo que tengas que hacer, yo distraigo a Erica.
Asentí y rápidamente me fui.
Comencé a abrir cada una de las puertas de la casa, entre tanta gente que encontré, pude ver a Dann con un chico.
—Oh, lo siento Danny —tapé mis ojos y salí.
Al entrar a la última habitación, me encontré con una Arizona tirada sobre la cama en sosten y falda, mientras Carina estaba sobre ella.
—¿Qué carajo haces? —grité cuando vi que la rubia no se movía.
—¡Vete! —grito la italiano.
Empujé a Carina e intenté hacer que Arizona reaccionara, pero parecía dormida.
—¡Esto es abuso!
—Ella dijo que si antes de dormirse.
—¿Eres tonta? —grité. —Sal de aquí.
—No vas a echarme.
—Voy a llamar a la policía si no sales de aquí —apreté mis puños.
Carina levantó sus manos y salió de la habitación.
—Ari —acaricié su rostro. —Debes despertar.
—¿Mhm? —dijo entre dormida. —¿Callie? —susurró
—Pequeña, debemos irnos.
Tomé mi móvil y le envié un mensaje a Dann para que me ayudase.
—¿Qué ocurrió? —preguntó nerviosa cuando ingresó a la habitación.
—Carina intentó abusar de ella —dije en su oído.
—Mierda —lloriqueó. —Debí haber estado para ella —se limpió las lágrimas.
—Saquémosla de aquí Dann.
El chico la tomó en brazos y nos fuimos de la casa intentando no ser descubiertos por nadie. Al llegar a su auto, le pedí que nos dejara en mi casa.
Recosté a Arizona en mi cama y la cubrí con mantas, no sin antes quitar sus botas.
Salí de la habitación para buscar unas pastillas para el dolor por si llegaba a despertar, cuando me encontré con mi padre.
—¿Ella está aquí?
Asentí.
—Todavía la amas...
—Yo... no lo sé.
—No fue una pregunta Callie —ladeó su cabeza.
Bajé mi mirada.
—Solo quiero protegerla, hoy pudieron hacerle mucho daño irreparable.
—Entonces protégela, estoy seguro de que ella no se opondrá —sonrió apenas y volvió a su cuarto.
Respiré profundamente y volví a mi habitación con lo que buscaba. Arizona se encontraba sentada al borde de mi cama con su mano en la frente.
—¿Todo está bien? —pregunté.
—Joder —maldijo. —¿Qué sucedió? ¿Por qué estoy aquí? No recuerdo nada.
—Normal con la cantidad de droga que consumiste —dije molesta.
—¿Cantidad? Solo he fumado marihuana.
Fruncí el ceño
—Eso no es normal, estabas desmayada...
Arizona me observó triste.
—¿Sucedió algo malo? ¿Por qué estoy aquí?
Suspiré y la observé con tristeza.
"El sabor amargo de mi furia
The bitter taste of my fury
Y todos los líos que hiciste
And all of the messes you made
Sí, crees que te escapaste
Yeah, you think that you got away
Pero estoy en los árboles, estoy en la brisa
But I'm in the trees, I'm in the breeze
Mis pasos en el suelo
My footsteps on the ground
Verás mi cara en cada lugar
You'll see my face in every place
Pero no puedes atraparme ahora
But you can't catch me now"
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Blondie
Fanfiction"Sobre todo, te odio porque pienso en ti. A menudo. Es repulsivo, pero no puedo evitarlo." - El príncipe cruel.