Love Me Tender

Capítulo 21 - ¿Qué hacer cuando tienes la cabeza hecha un lio?

Lauren volvió, por lo que Kira se había vuelto a quedar a solas con sus hermanos menores.

Sintió mucha rabia cuando la vio, con esa sonrisa falsa de mosquita muerta cómo si no hubiera engañado a su marido con otro hombre.

No la conocía mucho pero solo esa revelación de Harry fue suficiente para que la odiara profundamente.

Al menos tenía a su madre con ella. Solía ir a verla muy a menudo, sobre todo cuando sus hermanos estaban en el colegio. El apartamento era muy grande y muy acogedor, pero prefería quedarse a dormir en la casa de la familia Morgan.

—Tía Charlotte, ¿es cierto que fuiste actriz?

—Si. Pero por muy poco tiempo. Fui más bien actriz secundaria. Lo hice para ganar un poco de dinero mientras mi carrera musical empezaba a despegar... —contestó la cantante con una pequeña sonrisa, acariciando el pelo del pequeño Johnny.

Los cuatro venían del cine.

La única que sabía que Charlotte estaba con ellos, además de su tio Richard, era Hellen, a quién no la importaba que estuviera con sus hijos.

Lawrence no lo sabía y era mejor que fuera así, su reacción era lo que más temía Kira.

Nunca habían logrado tener una relación cercana, trataban de llevarse bien por su bien, al final, cada uno iba por su lado y trataba de evitar hablar el uno con el otro,

Después de ver una película, fueron a una bolera a pasar el rato, ya que a los más pequeños les apetecía jugar a los bolos.

—Kira, has estado muy callada todo el día...¿Qué es lo que te tiene tan distraída, cariño?

—Nada, nada...No pasa nada...

Estaban solas, sentadas en una mesa cerca de los bolos, vigilando a los niños.

Su madre la miró con sospecha.

Entrecerró los ojos, mirándola detenidamente, cómo si pudiera leer lo que había en su mente.

Se hubiera llevado una grata sospecha de haberlo hecho pues habría descubierto lo que pensaba de su tío.

No podía confesar eso y mucho menos a su madre.

En una escena de la película, los protagonistas se besaban tiernamente, lo que hizo que Kira no parara de pensar en su primer beso. En el de ella y Richard.

—Kira, ¿has conocido a alguien desde que llegaste aquí?

—¿Alguien? ¿Cómo quién?

—Oh, ya sabes querida...Alguien que sea capaz de hacerte suspirar...

—N-No sé a que te refieres, mamá...Te lo digo en serio...

Si había una persona que la hiciera suspirar. Su tío.

Ese simple tartamudeo fue suficiente para que Charlotte supiera que alguien había conquistado el corazón de su pequeña.

Se sentía feliz y emocionada de que se hubiera enamorado. Imaginó cómo debía de ser ese chico de mil maneras distintas en su cabeza.

Incluso si Kira no se lo pedía, la ayudaría y la aconsejaría todo lo posible.

Pero ni en varias vidas, la cantante se hubiera imaginado que su hija, a la que siempre sería para ella su niña pequeña, tenía los ojos puestos en el mejor amigo de su padre, y mucho menos podría pensar que él también sentía cosas por ella.