Capítulo: 7

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Sara.

Semanas después....

Este tiempo que ha transcurrido han sido la verdad muy buenos para conocer a Dániel Scott, y me es grato saber que él es tan distinto a Diego.

Me duele darme cuenta lo tonta que fui por haber perdido momento que eran importantes para mí, solo porque a mi ex esposo no le daba chance para ir conmigo a esas funciones benéficas que tanto me gustaban ir.

Pero claro el grandioso medico reconocido Diego Scott no tiene tiempo para esas cosas.

Ni que decir de nuestro aniversario o eventos familiares. Sin duda acepté muchas faltas a Diego.

Sino fuese porque lo encontré follando con su secretaria yo aún seguiría atrapada en su nido de mentiras y engaños.

También era tan desgastante fingir felicidad en cada reunión familiar. Yo lo hacía para no preocupar a mi padre, él sin duda habría molido a golpes a Diego.

Por alguna extraña cosa, a él no le caía en gracia mi ex esposo.

Al parecer mi padre intuía la podredumbre que ocultaba Diego.

Para mi padre Anthon Spears mi ex marido no era alguien para mi.

Yo nunca le conté que Diego y yo nos divorciamos por una infidelidad de su parte porque sino le habría querido dar la paliza de su vida.

Y yo ya no quería más drama en mi vida gracias a ese imbécil.

Además que Jorgie fue a buscar a Diego y ambos se fueron a las manos, y no me gustó para nada.

Cabe recalcar que odio la violencia, eso me pone de los nervios.

Duré un par de días enojada con mi amigo por eso, pero al final lo perdoné porque él solo quería defender me.

Diego siempre fue un ser doble cara y sin palabra.

Yo fui la única tonta que no lo vió.

Diego fue uno de mis peores errores.

Y aunque ahora pueda ver que Dániel sea diferente no me quita el miedo de que talvez me equivoque con él, y salga lastimada.

Estoy harta de sentirme vulnerable, noo yo soy una mujer fuerte ahora.

Mi vida no se puede condicionar por los deseos de un hombre, sin importar que este desate todo el fuego que dormía en mi interior.

Porque sí él es capaz de mover tanto en mí, también puede acabar conmigo si le place.

Y me da pavor pensar que en esta ocasión no logre sobreponerme.

Tengo que tener más cuidado puesto que si caigo demasiado rápido en las redes de Dániel Scott, quien sabe lo que me ocurra al ver su realidad.

Una realidad que quizá pueda armarme o desarme con fuerza.

Regreso al hoy cuando mi teléfono suena y me hace saltar del susto.

Jodido aparato del demonio.

Al mirar la llamada entrante sonrío al ver que es mi padre así que le contesto:

__Hola papá buen día, ¿y eso que me llamas?

__Hola mi niña, te llamo porque necesito que hablemos en persona, y es algo urgente...Si pudieras venir a la hora del almuerzo.

__Responde la voz tensa y ronca del hombre que hace que su hija frunza el ceño enderezándose en su puesto.

__Eeh, claro... Iré a verte, y almorzamos juntos mientras me cuentas que te tiene tan preocupado.

Somos Fuego (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora