Sara.
El día de la boda llegó conmigo sintiéndome de la patada porque sucumbí a los deseos de una alocada Ryles en realizar una despedida de soltera.
Por otro lado...
Mi mejor amiga anda contenta con su novio.
El se llama Jayson Kruk y es un compañero de trabajo.
También sé que mi padre no le importa eso de que se relacionen entre sí, si aquello no perjudica tu trabajo.
Volviendo al tema original...
Ella junto con el alocado de Jorgie es imposible negarse.
Ambos son un dúo potente cuando algo se les metía entre ceja y ceja.
Siempre admiré sus capacidades para convencer a alguien, el punto es que aborrezco cuándo me lo hacen a mí.
Ahora estoy ojerosa y cansada para todo el día que estaré de aquí para allá.
Aunque reconozco que lo disfruté, en especial cuando aquel sexy bombero y ese candente vaqueros restregaban sus musculosos cuerpos con el mío.
También sé que Dániel es mucho más musculoso que esos dos.
Mierda no debo pensar así de él.
No seas cínica, mira que te lo has besado varias veces.
Ignoro a mi conciencia que sé que tiene la razón.
Debo admitir que llevó meses de sequía, una no es de hierro.
Y va a ser totalmente tortuoso resistirme a los encantos de mi futuro esposo.
Dániel es la fruta prohibida para mí.
Sé que es un matrimonio por el civil pero igual cansa.
La mansión Spears dónde nací y me crié está completamente adornada con mis flores favoritas.
Las orquídeas.
Sé también que podíamos casarnos sin la necesidad de tanto teatro.
Pero en el fondo deseaba esto así que no discutí cuando Dániel me buscó para los preparativos de nuestra boda.
Fue gratificante ver que se interesa en esto, él están distinto al idiota de su hermano Diego.
Mi ex marido.
Sonrío al recordar que hace dos días atrás un muy nervioso Dán me busca en la oficina y sin verlo venir posa una rodilla en el suelo.
Y del bolsillo de su saco saca una cajita roja. Joder se me aguaron los ojos así como mi corazón galopaba a todo prisa.
__Sé que esto es una farsa, ¿pero quién dijo que no podamos llevarnos bien? ¿Quieres ser mi esposa, Sara?
__Pronuncia Dániel nervioso. Para mirar cómo la Pelirroja sonríe.
__Si, acepto Dán.
__Concedí emocionada para mirar cómo el saca la argolla matrimonial y con suavidad me la coloca en el dedo anular de mi mano.
Doy un respingo regresando de mis recuerdos para ver cómo una irritada Ryles me mira seria.
__Se que estás ansiosa por casarte con el papacito de Dániel, pero no es justo que por pensar en él te olvides de mí.
__Se queja la Ojiazul frustrada para sonreír cuando su amiga la abraza.
__Nadie ocupará tu lugar, tu eres mi amiga, mi hermana del alma. Ni siquiera Dániel sería impedimento para ir contigo.
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Somos Fuego (Completa)
RomanceDesde niña soñé con vivir mi felices por siempre al casarme con el hombre que amaba, pero la vida misma se encargó de mostrarme la cruda realidad. ¿Y es que quien me iba a decir que terminaría divorciada un año después de casarme con el prestigioso...