ℕ𝕦𝕟𝕔𝕒 𝕋𝕖 𝔻𝕖𝕛𝕒𝕣é || 𝕋𝕒𝕖𝕂𝕠𝕠𝕜/𝕍𝕂𝕠𝕠𝕜

𝙻𝚊 𝙲𝚞𝚛𝚒𝚘𝚜𝚒𝚍𝚊𝚍 𝙼𝚊𝚝ó 𝙰𝚕 𝙶𝚊𝚝𝚘 𝙿𝚊𝚛𝚝𝚎: 𝟷

JungKook

     Pasaron unos minutos, minutos que se sentían completamente interminables. Eran eterno porque no paraba de pensar en lo que le sucedería a TaeHyung si no obtenía antibióticos y analgésicos.

     ¿Moriría?, si el lo hacía ¿Probablemente yo también? ¿Qué podría ser de mi sin él?

     —JungKook, hay que salir.—soltó alentándome a que ambos saliésemos del lugar.

     —Está bien.

     Me levanté de donde estaba y comencé a revisar el cuerpo de TaeHyung, en busca de la pistola que él siempre utilizaba. Tendría que ser rápido en mi salida, TaeHyung no estaba resistiendo.

     Al agarrar el arma y alejarme un poco de él, un pensamiento llegó a mi mente.

     «Oh TaeHyung, me gustaría que me envolvieras en tus brazos y nunca me soltaras, al menos hasta que toda esta pesadilla acabe.»

     Había vuelto a encontrar el amor. Estaba perdido hasta que lo encontré, encontré un lugar donde dejar mi carga, encontré un lugar donde me podía sentir seguro. Encontré a una persona que fue capaz de llenar el vacío que tenía en mi corazón. ¿Y ahora tenía que ver como estaba agonizando?

     Guardé el arma en mi cinturón y, junto a YoonGi, salí hacia la calle. A decir verdad  no tenía ni la más mínima idea de donde ir, sin embargo, tenía muy en claro qué es lo que debía hacer.

     —Tú ve por ahí, ese tipo de casas suelen ser de doctores.—señaló unas tres viviendas que parecían ser más bonitas que el resto.

     —¡Está bien! ¿Y tú?, ¿Qué harás?.

     —Yo... iré hacia el otro lado. Te veré al atardecer, Jeon.

     En ese momento algo en mi mente hizo ruido, ¿Cómo hacía para conocer mi apellido? ¿Qué más sabía de mi?

     —Oh, bien.

     —Adiós

     —Ommh, sí

     Antes de que pudiese decir algo más se marchó. Algo en mi decía que no nos volveríamos a ver por un buen rato.

     Apreté mis temblorosas manos, unas que alguna vez fueron muy juguetonas, y comencé a trotar para alcanzar las viviendas donde podría ser que estuvieran los medicamentos que necesitaba.

     Inhalé y exhalé, procedí a tomar la manija de la puerta e intentar abrir esta misma. Lentamente la entrada se fue abriendo, dejando ver una casa llena de sangre, completamente aterrador.

     Paso a paso fui avanzando hacia la sala de estar. Me era imposible no tensar mi cuerpo y no ponerme nervioso ante tanta sangre.

     Debía decir la verdad, anteriormente estaba aterrado al ver sangre, sin embargo, ahora al verla solo me provoca un extraño nerviosismo, nada parecido a lo que hacía antes.

      Miré las escaleras y había una especie de barricadas en estas mismas, unas barricadas hechas de muebles. Era doloroso pensar que todas las personas que habían en ese lugar, probablemente, ya estarían muertas.

     Seguí avanzando hacia la cocina, quizás había algo que podíamos rescatar. Sin embargo, al momento de mover la cabeza hacia la derecha, justo en el comedor, logré ver la razón por la cual estaba hecha la barricada en escalera.

     La cantidad de infectados que había en ese lugar realmente lograron aterrarme. Quizás debería haber vuelto y regresar aquí con YoonGi, estaba seguro de que no podría contra tal cantidad de infectados.