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Cuando llegamos encontramos a Lily y Mary chapoteando en una piscina, James dejó su mochila sobre una silla y se acercó a la piscina para saludar a las chicas. Yo lo imité y me senté en el borde de la piscina. James decidió saltar hacia la piscina y salpicar a todo y a todos.

Eso era lo que más me gustaba de aquel grupo de amigos. Todo era bromas y amistad, las chicas podrían haber chillado e insultado a James por salpicar sus moños semiperfectos, en cambio, rieron y Mary comenzó a salpicar al moreno mientras la pelirroja nada hacia él para sumergirlo bajo el agua. Inmediatamente risas y todo es un juego. Me gusta el ambiente que crean, creo que me gustan ellos, sus bromas y juegos inofensivos.

El tiempo pasa mientras hablo con Lily, quien resulta ser la más tranquila de aquel grupo de amigos, James y Mary juegan como niños pequeños sumergidos hasta el cuello en el agua.

–...y a mi madre casi le da un golpe de calor así que tuvimos que volver. –Lily relataba mientras se reía y observaba a sus mejores amigos. Me observa de reojo cuando sumerjo mi mano en el agua fría de la piscina y luego la pasó por mi frente. –¿Tienes calor? ¿Por qué no te bañas un rato?

–Estoy bien, solo no estoy acostumbrado a este sol. –Lily intenta replicar pero James nos interrumpe.

–¡Chicos! –Lily reacciona cuando siente el agua en su frente. –Tenemos hambre. –Definitivamente Mary y James son dos niños pequeños.

–Pensaba que teníais la suficiente edad como para prepararos vosotros la comida. –Me río ante el comentario porque suena a algo que Dorcas también diría.

–Vamos Lily, seguro que no quieres que mi madre me eche la bronca por quemar la casa. –Mary se ha colocado frente a la pelirroja y la está mirando con ojos suplicantes, Lily mira hacia otro lado implacable–. Porfa florecita. –Lily se sonroja ante el apodo al ser pronunciado frente a nosotros así que ríe y aplasta el cabello rizado de Mary mientras sale del agua.

James y yo seguimos a Lily para ayudar mientras Mary se queda flotando en el agua cantando a todo volumen canciones que aun no he escuchado. Lily comienza a cocinar mientras nos manda y me parece la situación más graciosa del mundo.

James y yo nos quedamos solos en la cocina mientras recogemos vasos y platos.

–¿Estás bien? –James pregunta mientras rebusca en un armario. No me mira, no es una pregunta de excesiva preocupación, solo quiere saber de mi. Asiento mientras observo el móvil con cierta indiferencia. –No te has metido en la piscina.

–No me apetecía mucho, después de todo íbamos a comer enseguida. –Guardó el teléfono y cojo unos vasos que James había colocado sobre la encimera.

–Entiendo. –James murmura mientras yo me encamino hacia la puerta. – Regulus. No quiero que te sientas incómodo, si te pasa algo, necesitas decirme algo o solo quieres irte, dímelo.

–Estaré bien. –Espero convencerme tanto como a James. Ambos sonreímos y James comienza a caminar pero esta vez soy yo quien lo detiene. –Puede que no me sienta cómodo quitándome la camiseta delante de nadie.

–Esta bien, –James sonríe comprensivamente y vuelve a caminar. –báñate con camiseta, juro solemnemente que ellas no dirán nada. – Sonrió agradecido. James añade mientras me devuelve la sonrisa. –Gracias, por confiar en mí.

Cuando volvemos Mary por fin ha salido del agua y está sentada en la mesa hablando con Lily. James y yo colocamos los vasos en la mesa y Lily comienza a servir las hamburguesas.

Después de comer nos sentamos en el césped. Mary está explicando un juego de cartas mientras Lily toma el sol apoyando la cabeza en sus piernas. Más tarde, después de perder varias veces y hablar sobre planes que podríamos hacer James y Mary se levantan en silencio y sonriendo de forma extraña.

–Ahora venimos. –Asiento mientras veo cómo caminan y miró a Lily.

–Traman algo. –Lo sé, pero no me preocupa demasiado. Me acuesto sobre el césped junto a la pelirroja y cierro los ojos para protegerlos del sol del mediodía. –A veces son agotadores ¿Sabes? Su personalidad es así, inagotable.

–Lo entiendo, Sirius y Marlene son exactamente iguales. Pero los quiero, al igual que tú los quieres a ellos. Y el amor hace que nos agrade su energía inagotable. –Por un momento siento algo de pena en el pecho, los echo de menos. –Después de todo ellos son mi vitamina, una pequeña ración de ellos todos los días es lo mejor que puedo tener.

–Son nuestras personas vitamina. –Nos quedamos en silencio, un silencio tranquilo y agradable, hasta que una sombra me cubre el sol y abro los ojos.

–¡Agua va! –Mary y James gritan y luego nos empapan de agua extremadamente fría. Lily comienza a gritar.

–¡Mary Macdonald! Te juro que voy ha... –Digamos que Lily utilizo muchos más insultos de los que conocía en esa oración.

Me doy la vuelta tras cansarme del discurso de Lily y observo a mi propio agresor. James me mira en la distancia, con el cubo en las manos, atento a cualquier signo de agresión. Me levanto y doy un paso hacia el, James retrocede otro paso.

–James.

–Regulus... —James sonríe nervioso. –Te juro que...

–Acompáñame. –James me mira con desconfianza, señaló con la cabeza en dirección a la piscina y James la observa. – Vamos, acompáñame. –Comenzamos a caminar hacia la piscina y llegamos al borde. – ¿Ves el fondo de la piscina? –James se inclina un poco para verla y yo me coloco detrás de él.

–¿Qué tengo que observar? –Pero entonces yo lo empujo y James cae en la piscina. –¡Regulus! –Comienzo a reírme y James me mira con impaciencia, luego sonríe y me extiende la mano. –Está bien, lo siento. ¿Me ayudas a salir? –Asiento y extiendo la mano, pero entonces James tira hacia él y yo también caigo al agua.

–¡Dios! Está fría. -Miró a James y ambos comenzamos a reír. Lily y Mary vienen corriendo una al lado de la otra y saltan a la piscina , cuando emergen del fondo sonríen y Lily sujeta las mejillas de Mary mientras la besa. Ellas son hermosas juntas. 


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Porque tengo la creencia de que todos tenemos y tendremos una persona especial, esa persona que es capaz de transmitir alegría y energía por mas oscuro que sea todo. 

Creo que todos tenemos nuestras personas vitamina. 

Ahora la pregunta es ¿Quién es la vuestra?

Hasta el lunes que viene ♡♡♡

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Ma douce souffrance - JegulusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora