Intensity | Draco M.✔️

C. IX

Intensity

Draco Malfoy

Dios, ¿acaso ella lo hace a propósito? Sé que se junta con ellos solo para molestarme y encima coquetea con el estúpido de Potter, como si no estuviera enterada de todo lo que yo siento por ella.

He intentado ocultarlo todo este tiempo, pero todo el mundo ya se ha dado cuenta (cuando digo todo el mundo, no se lo tomen tan literal, solo son Zabini, Grabbe y Goyle). Notaron los ojos con los que la miro y el infierno que ha sido para mí no poder acercarme a ella todos estos días. Tener que verla con Granger, Weasley y Potter ha sido horrible. Escuchar cómo Potter elogia su lindo cabello castaño me hizo querer reventarle la cara a golpes, para que deje de ser el chico que sobrevivió por acercarse a mi chica.

Estaba sentado en el gran comedor con los puños apretados y no quería comer del enojo.

Zabini se había estado riendo de mí, porque el motivo de mi enojo eran celos.

Mientras Zabini seguía riendo, alguien se sentó a su lado y él volteó sorprendido. Quien se había sentado a su lado era Selwyn, con sus lindas pecas, sus ojos negros que transmitían seriedad y me hacían sentir un cosquilleo en mi vientre, y en otro lado... ¡Pero ese no es el punto!

Ellos dos parecían estar teniendo una conversación seria, pero mi mente se bloqueó y no podía escuchar la conversación, solo lograba ver lo linda que es Selwyn.

—Sin babear, hermano—dijo Grabbe, sacándome de mi trance.

Rodé los ojos, demostrando que su chiste no me dio gracia.

Al volver a ver a Zabini y a Selwyn, estos estrecharon sus manos. ¿Habían llegado a un acuerdo? No lo sé, y no me pregunten sobre qué era su trato porque había estado muy ocupado admirando a Selwyn. (Les aviso solo por si no se dieron cuenta).

Selwyn volteó hacia la mesa de Gryffindor donde el grandísimo imbécil de Potter le hacía señas para que se sentara con él. Selwyn se puso de pie y planeaba ir con él. Ni en broma yo se lo permitiría.

Me puse de pie también y la tomé del brazo mientras caminaba rápido hacia la salida del gran comedor. Podía sentir la mirada de todos sobre ambos. ¿Pero saben qué? No me importaba que todos piensen que es mía, porque de hecho lo es, o bueno, lo será dentro de poco.

—¿Qué haces?—preguntó Deva mientras forcejeaba para que la soltara.

La tomé más fuerte del brazo y no le contesté porque ni yo sabía lo que hacía, simplemente los celos se habían apoderado de mí.

Si hay algo que sobra en Hogwarts son salones vacíos; el castillo es enorme y solo utilizamos unos cuantos, por ello no fue difícil encontrar un salón y entrar con ella allí.

Aun sin soltar su brazo, cerré la puerta. Sentía su mirada mientras cerraba la puerta; ella ya no forcejeaba para que la soltara porque se dio cuenta de que no pensaba soltarla.

—¡¿Por qué mierda me trajiste aquí, psicópata?!—ignoré su pregunta.

—¿Qué tienes tú y Potter?

—¿Qué te importa?

—Lo haces para molestar, ¿cierto? Te juntas con Granger porque sabes que no me agrada, y con Weasley y Potter para molestarme. También coqueteas con Potter para sacarme de quicio—comencé a caminar mientras lo decía y ella retrocedía.

—No todo gira en torno a ti.

—No, tú sí lo haces—la espalda de Selwyn chocó contra la pared, la tenía acorralada.

—¿Qué? ¿Por qué lo haría?

Mi mirada bajó a sus labios; tenía puesto brillo labial. Sentía una gran necesidad de estrellarlos con los míos, para que se callara y admitiera que me pertenecía.

—Que mier...-

No aguante más y la calle con un beso. La tome de las caderas mientras movía mis labios sobre los suyos que al principio se negaba a seguirme el beso, pero al poner mis manos apretando sus caderas pude sentir su cuerpo debilitarse y comenzó a seguirme el beso.

Abrió un poco la comisura de sus labios dándole permiso a mi lengua para explorar su boca. Era como si nuestros labios encajaban perfectamente como si hubieran sido creados para ser unidos.

Para mi desgracia el oxígeno se nos comenzaba a acabar, no quería separarme de sus dulces labios, pero tuvimos que hacerlo. Al separarnos la vi a los ojos ella también me miró, sus ojos tenían un brillo al verme Dios me encanta eso.

Temí que se arrepintiera y lo dejara todo hasta aquí, pero una vez ella recuperó aire y no dudo en devorar mi boca. Van a disculparme pero esta mujer me había puesto demasiado duro con solo besarme.

Su mano desabotono unos botones de mi camisa y metió su mano dentro. Sentí todo un hormigueo allí abajo y en todo mi cuerpo cuando comenzó a acariciar mi abdomen. Tome la parte de atrás de su cabeza para profundizar más el beso, la mano que tenía sobre sus caderas fue a su camisa para comenzar a desabotonar su camisa como ella hizo con la mía.

Dios cuando mis manos se acercaban a sus senos, alguien tocó la maldita puerta.

—¿Deva, estás aquí?—¡Puta madre, era Potter! Él acababa de interrumpir uno de los mejores momentos de mi vida.

Selwyn rápidamente se separó de mis labios y quitó su mano de mi abdomen. Comenzó a abotonar nerviosa su camisa y a limpiarse los labios.

—Sí, Harry, ya voy.

—¿Estás con Malfoy?

Selwyn levantó la vista a mis ojos nerviosa y me estaba pidiendo ayuda con la mirada. Me acerqué a su oído y le susurré:

—Tranquila, Linda, yo no diré nada.

—No, Harry, estoy sola.

—¿Por qué estás sola allí?—Dios, Potter, ¿qué te importa?

—Un tema personal—Sí, Potter, podría haber sido más personal si no nos hubieras interrumpido.

Terminó de acomodar su camisa y se dirigió a la puerta. Salió del salón y se fue con Potter. Aunque en este momento no me importaba que se hubiera ido con Potter. ¡Al diablo! ¿A quién le importaría? Acabo de comerle la boca a la chica con la que he fantaseado mucho tiempo...

———

★★★
Hello Lindas.
Ven les dije que este iba a ser EL CAPÍTULO.
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-T