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Había despertado en medio de la noche con los gemidos de dolor de Taehyung, demasiado cerca de mi oído, demasiado desgarradores para mi Alfa y para mí, y me extendí hacia la mesita de noche para poder prender la luz y observar su cuerpo sudoroso, su frente brillante mientras las gotas caían desde su sien hacia abajo, incluyendo parte de su cuello, que estaba rojo como cuando se sonrojaba.

Mi mano encontró el camino hacia su mejilla, notando con estupefacción que Tae ardía en fiebre. Y cuando digo arder es real.

Sus gemidos bajos con los ojos apretados mientras se movía de un lado al otro entre sueños, incómodo con su cuerpo pero temblando bajo las sábanas. Retiré la colcha de encima suyo, y aún en la profundidad de morfeo, Taehyung se estremeció.

Su pijama estaba sudado, pegoteado a su cuerpo y manteniendo la humedad en él, y mi mente recordó las instancias en que mi madre Omega me habló sobre el celo de su casta y cómo tenía que ser mi cuidado con el Omega con el que fuera a enlazarme cuando estuviese en su calor.

"—Sudarán mucho. Y arderán en fiebre, —fue su explicación sobre los peores días de su celo, y con Seokjin teníamos los ojos abiertos mientras escuchábamos, a pesar de que era muy parecido al que pasaríamos nosotros mismos en el futuro. —y a diferencia de un Alfa, no pueden controlar su temperatura corporal. Deben desprenderlos de sus ropas, porque de otra forma se van a resfriar y un resfrío mal cuidado en un Omega puede ser mortal. Los supresores Omega tienen un calmante para el dolor en conjunto con el supresor en sí, por lo que los ayudará a pasar el primer día sin complicaciones. Recuerden siempre tener a mano."

Mi Alfa saltaba de un lado a otro en mi interior, su corazón latiendo emocionado de ver a Taehyung desnudo y me sentí como un completo pervertido, más porque no podía cerrarle los ojos a mi Alfa para intentar ayudar a Tae.

Corrí hacia la cocina, en donde saqué unos paños y un bowl de agua helada con hielo, y los fui a dejar a mi habitación antes de correr de vuelta hacia donde guardábamos los remedios, en su gran mayoría para sanar las heridas, anticonceptivos, condones Alfa y supresores. Somos animales, ¿qué más quieres?

Busqué por entre los supresores alguno que pudiese servir, y en el fondo de la caja encontré uno que era un supresor Omega que no estaba vencido. Ni siquiera sé si Seokjin o yo lo compramos, pero había quedado olvidado bajo toda la pila de supresores Alfa que nos habíamos traído desde nuestro clan, pero al menos no estaba vencido. Funcionaría.

Con una botella de agua corrí hacia Tae y la deposité en la misma mesita de noche que con el resto de las cosas, y moví el hombro de mi Beta.

—Taehyungie... Hey... Tae...

Él abrió los ojos jadeando, sus orbes desenfocadas y sus pupilas dilatadas por el dolor, su boca entreabierta y seca, por lo que tragó saliva antes de hablar.

Beautiful fate |  kookvDonde viven las historias. Descúbrelo ahora