Fake love

FINGE SER MI NOVIO

Seguía en shock por lo que acababa de decir,¿Cómo que "novio"?

—¿Qué estás haciendo?—murmuré y ella me dio un leve golpe pero notorio por detrás, dándome a entender que me callara.

—Mientes. Es imposible que encuentres a alguien así de la nada.

—¿Qué no?

Todo pasó tan rápido que no tuve tiempo de reaccionar. Ella se giró, acunó sus manos en mi cara, para luego tirar de mí y estampar sus labios contra los míos. Estaba en shock. No podía creer lo que estaba pasando. Honestamente se sintió extraño, me sentía raro besando a una extraña, pero por otra parte, sus labios eran tan dulces... Ella enredó sus dedos en mi pelo para acercarme más y profundizar el beso. Así que yo la agarré de la cintura y tiré de ella hacia mí. Se sentía tan jodidamente bien que olvidé que no estábamos solos. El chico que estaba con ella carraspeó, dando señal de que nos contiviesemos, que él estaba ahí.

Ella se separó rápidamente, nuestras respiraciones eran algo agitadas y de nuevo le miró.

—¿Ves? No te mentía. Estoy saliendo con alguien. Ahora que lo sabes...vete.
—se puso seria y me agarró con más fuerza la mano.

—Tú...—se mordió el labio—¿Desde cuándo? Sofí,¿No éramos felices?

—¿Cómo?—ella soltó una risa seca— Eso sería en tu pequeño universo donde tú gobiernas y todo es perfecto para tí. Pero ahora quiero que te vayas—Ella entrelazó nuestros brazos—.Soy feliz con él, no contigo.

—Pero...

—¡Que te largues de aquí!—le gritó.

Nos mantuvimos en silencio unos segundos bastante incómodos y después el chico cerró sus manos en un puño, mordió su labio inferior y antes de irse soltó:

—Esto no va a quedar así.—posó una mirada seria en ella y luego cayó en mí. Después se marchó.

La chica soltó un suspiro de alivio y se llevó la mano al pecho.

—¿Qué demonios...?

—¿Eh? Ah, perdóname por favor—agachó la cabeza— Necesitaba ayuda y tú eras el único por aquí...

—¿A qué ha venido todo esto?

Ella miró a nuestros alrededores, comprobando que nadie nos viera ni oyera.

—Oye, sí me acompañas a la cafetería te lo explico todo. Por favor.

La chica realmente parecía...¿Avergonzada? ¿Apenada? Diría tímida, pero después de tremendo beso, me cuesta creerlo. No me aparecía para nada ir con ella, tan sólo quería ir a mi cuarto, dejar mis cosas y conocer un poco el campus, con suerte a mi compañero de habitación...Pero también me carcomía la curiosidad de por qué mierdas ella llegó de la nada, afirmando ser mi novia y besándome sin más. Tras unos segundos de pensar, pasé mis dedos por mí cabello algo revuelto ya que ella anteriormente enredó sus dedos en mi pelo y solté un suspiro. De nuevo la miré, estaba algo seria y me miraba esperando mi respuesta. No tuve más remedio.

—Pff...Está bien.

—Gracias.—sonrió, aliviada.

Me guío hasta una cafetería cercana al campus, no muy lejana, estaría a unos cinco minutos andando. Nada más entrar, ella se acercó a la barra.

—Hola Mario.—ella le saludó, sonriente.

—¡Ey Sofí!

Un chico rubio, de unos ojos verdes esmeralda, algo más alto que yo—y bastante atractivo—le devolvió la sonrisa. Vestía de uniforme, supongo que trabajará allí.