Emma Clifford es la mejor amiga de Lando, y así ha sido por demasiado tiempo, prácticamente eran hermanos y ella siempre lo acompañaba a las carreras, hasta que inicio sus estudios en la universidad y dejo de ir por completo, unos años después vuelv...
Emma caminaba por los pasillos de su universidad queriendo desparecer e iniciar desde cero en algún otro lugar, su mente estaba en otro lugar y tenía que tomar su exámen, entró al salón y siguió en automático como se le había empezado a hacer costumbre, terminó su exámen y se fue de regreso a su casa, vió como una llamada de Oscar entraba y solo dejó el teléfono a lado, había estado evitando a todo mundo, apenas y le contestaba a Lando y era solo para saberle que seguía viva. Al próximo día era su último exámen y después de eso tendría que viajar a Estados Unidos de emergencia, por lo menos la habían dejado terminar sus exámenes, iba a apagar su teléfono cuando una llamada entro.
–Hola.– dijo sin mucho ánimo.
–Emma, dios, estás bien? Apenas y contestas.– dijo Lando del otro lado de la línea.
–Lo se perdón, he estado vuelta loca con los exámenes y me la paso cansada, es todo.– dijo Emma en respuesta, intentaba sonar animada pero no le salía, es como si no pudiera mostrar ninguna emoción y eso la desesperaba.
–No te escuchas bien, yo he estado cuando haces exámenes y tampoco te escuchas tan... robótica, segura qué estás bien?– volvió a preguntar el británico preocupado por su mejor amiga.
–Si, si, supongo que es el estrés.– mintió la chica.
–Te creeré...Oscar ha estado preguntando por tí, se ve preocupado.– dijo intentando alegrarla sin saber que eso solo la hizo sentir peor.
–Oh, pues si quieres dile que estoy bien, no lo se, no creo ir a ninguna carrera en un tiempo.– admitió la estadounidense.
–¿Por? Yo te dije que no me molesta que se vean, pasó algo entre ustedes?–
–No, no, no pasó nada, simplemente tengo unos asuntos pendientes y no sé cuánto tiempo me tomé resolverlos.– dijo la castaña viendo cómo ya tenía una de sus maletas empacadas.
–De seguro todo se resolverá, no te preocupes...capaz que te voy a visitar en uno de los fines de semana libres.– dijo el británico.
–Si, sobre eso...no creo que esté en Inglaterra.– dijo Emma mordiendo su labio.
–¿Qué?¿Por qué?¿Dónde estarás?– preguntó Lando preocupado.
–No te preocupes por eso, estaré bien, no es la gran cosa, tengo que checar unas cosas y ya.– dijo en respuesta.
–Emma no me puedes decir que no me preocupe por eso sí prácticamente me estás diciendo que te vas.– dijo el piloto sintiendo preocupación, si no fuera porque tenía una carrera hubiera tomado el primer vuelo para ir a verla.
–Solo no te preocupes, si? Ya me tengo que ir, bye.– dijo colgando antes de que Lando pudiera decir algo.
Agarró la otra maleta que tenía y empezó a guardar más cosas mientras soltaba pequeñas lágrimas. Por otro lado Lando se quedó absorto en sus pensamientos mientras estaba en junta.
–¿Todo bien?– le pregunto Oscar cuando la junta terminó.
No, quiso decir Lando, pero como le explicaba a el que creía que Emma iba a desaparecer sin que se alarmara.
–Oh si, solo me quedé pensando en unas cosas es todo.– excusó el británico.
–De acuerdo...– dijo el castaño no muy convencido.
Oscar se moría por preguntarles sobre Emma pero no creía que era el momento, después de todo estaba en semana de exámenes, probablemente iría a la siguiente carrera y podría hablar con ella en persona.
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Emma desde la llamada
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