Pirámide (Akabane Karma x Lectora)

Situación 9 (Hogar)

La mudanza a la nueva casa fue algo complicada por sus horarios, pero era el último esfuerzo de esta luego de comprarla. Después de todo, ya se habían despedido del pequeño piso de (TN) y de donde vivía Karma.

(TN): Al fin, hogar, dulce hogar.

Karma: Desde ahora viviremos por completo aquí. Dormiremos y despertaremos aquí.

Tenían una caja con las últimas cosas que podían necesitar y al terminar de acomodarla miraron un poco el lugar. Incluso si lo habían visto muchas veces, la sensación de ver el resultado final era muy satisfactoria. Definitivamente fueron unos duros meses.

(TN): ¡Ah, es tarde para cenar! Ya debería estar cocinando

Karma: Espera, yo cocino hoy.

(TN): ¿Eh? Pero yo puedo hacerlo

Karma: No tengo nada que hacer ahora mismo, al contrario de ti.

(TN): Ya cocinaste hace una semana

Karma: Porque cierta persona se quedó hasta las 4 am en su trabajo.

(TN): No me arrepiento de nada.

Karma: Lo sé. Pero sabes, no es necesario que estés exhausta para que yo te ayude.

Miró un poco hacia otro lado. Era algo raro pedir permiso para ayudarla, pero era peor no hacerlo. Por los horarios de trabajo Karma tiene menos tiempo en casa, por lo que las tareas del hogar se distribuyen 80/20, siendo (TN) la que hace más.

Karma se sentía algo incómodo por eso, ya que (TN) también trabajaba, pero su cansancio era mayor y no podía hacer mucho más (una vez llegó al 70/30). Pero lo que no iba a permitir era que eso siga incluso cuando (TN) estaba exhausta, por lo que sacaba fuerza de donde sea para poder invertir la balanza.

Claro, esas fueron pocas veces, como 1 o 2 en todo el año. Pero sentía que ahora que estaba comprometido con ella y vivía a tiempo completo en su casa, podría hacer un 60/40 o un 50/50. O que, si los dos están libres, él pueda encargarse de las cosas para que (TN) descanse.

Karma: L-Lo siento si no lo hice antes... Mierda, esto es muy vergonzoso. Así que, déjame ayudarte a partir de ahora. Somos un matrimonio, ¿no? Y, sabes, no soy un inútil en lo que son cosas hogareñas.

(TN): Está bien, está bien ❤

(TN) se acercó a él con una sonrisa y le agarró la mejilla, seguido de alborotar un poco su cabello.

Karma: (TN)...

(TN): Lo siento, solo tenía ganas de hacerlo. Sabes dónde están todas las cosas de la cocina, ¿no?

Karma: Sí. Presté atención. Ah, también podemos tomar algo de vino, aunque no voy a dejar que te emborraches.

(TN): Hey, no caeré por una copa

Karma: Me lo creo. Ya, ve a tus cosas.

(TN): Sí ❤

Él se fue a la cocina y (TN) al cuarto que iban a compartir los dos. Ya era de noche por lo que tenía que bañarse. Tenían dos baños, uno para visitas, en el primer piso, y uno para ellos, solo accesible dentro del cuarto de ellos. Este era más grande que el de su piso, así que pudo disfrutar un baño caliente más cómodamente, aunque en su mente más había otra cosa.

(TN): Que lindo ❤...

Aun pensando en eso se apoyó un poco en el borde de la bañera para poder descansar la cabeza.

(TN): Son algunos detalles, pero me encantan... Qué buen esposo tengo...

Al escucharse, alzó la cabeza de golpe.