capitulo 55

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                                                                                      Carlos

No podía ocultar mi enorme sonrisa al caminar tomado de la mano de mi esposa mientras nos dirigíamos a la fiesta, no podía imaginar cómo había vivido tanto tiempo sin sentir esto, había sentido siempre un poder inmenso, nadie me vencía, jamás me sentía vulnerable, no tenía puntos débiles y ahora... mi punto débil era lo mejor que me había pasado en la vida... y la sonrisa dibujada en mi rostro era una muestra claro de ello... el monstruo se había enamorado... ya todo estaba acomodado, perfecto, un pasillo lleno de luces y un arco de flores nos guiaba allí, el terreno pegado al bosque. Mire a Elisa, se miraba totalmente hermosa en ese vestido blanco, por fin era mi esposa... mía...

Al entrar las mesas estaban acomodadas en círculo dejando un espacio en el centro donde daríamos nuestro primer baile como esposos, la cara de Elisa era de sorpresa todo allí era lujoso a mas no poder, Nadia le había dado unos toques extras, las mesas largas tenían centros distintos, algunos altos otros bajos, pero en todos resaltaban espejos, objetos plata y flores celestes como referencia de nosotros, ella siempre me recordaba a ese color, celeste... me daba paz y tranquilidad, como el correr del agua cristalina, como mirar el hermoso cielo despejado, por eso siempre le regalaba rosas azules, era difícil conseguirlas, mandaría hacer un jardín aquí mismo y a donde fuéramos solo para ella.

-Esto es bellísimo, me encantan las luces blancas colgantes- señalo arriba, pero yo solo podía verla a ella- y la mesa principal, wooo, increíble-

- ¿Sabes que es lo más bello? - me miro - tu- sonrió y el rojo invadió su rostro

- Pues tu casi estas tan bien como yo-

- Sé que lo estoy, pero no quiero hacerte sentir mal – brome y ella solo sonrió- Señora Hetcher, concédame el honor de un baile con usted- extendí mi mano y ella la tomo, fuimos a ese espacio y la canción de "perfect" comenzó a sonar, sin duda ella estaba perfecta.- Tu corazón es todo lo que tengo...Y en tus ojos, estás sosteniendo los míos..- susurre la canción en su oído, rápido sentí como su piel se erizaba, tome su mano y la gire, las luces blancas resplandecían su vestido blanco haciéndola lucir tremendamente hermosa, así que, sin temor a ser escuchado continúe - Cuando te vi con ese vestido, luciendo tan hermosa...no merezco esto...Cariño, te ves perfecta esta noche –sonrió en mis labios antes de besarme, mi esposa...

Seguimos bailando como si no existiera nadie más, aun después de terminar la canción y comenzar otra, algunos invitados se habían unido, en algún tiempo hubiera dicho que algo así era demasiado cursi, aun lo pienso, pero, en realidad, disfrutaba de este momento, ver su sonrisa, el mecer de su vestido y la sonrisa que su mirada me daba, ¡por favor! ¿en qué me había convertido esta mujer? Me comportaba como un tonto cachorro a sus pies.

-Gracias mi lobito- la mire confundido – por no rendirte y luchar por nosotros a pesar de tener tan pocas esperanzas- sonreí y acaricie su rostro – pudiste elegir cualquier cosa, elegiste estar conmigo-

- Siempre luchare por nosotros, siempre elegiré estar contigo y ser eso en que me conviertes tú, aunque sea demasiado cursi para mi gusto- río

- Elisa, vamos lanza el ramo – llego Nadia interrumpiendo, la mire de mala gana; sabía que quería algo como sacarme la lengua o decir un comentario fuera de lugar, pero aun ella me respetaba como su rey... por lo menos en público.

Elisa camino con ella mientras alguien ponía un banco blanco, me coloque a su lado y tome su mano para que no fuera caer, las mujeres atrás reían cada vez que Elisa fingía tirar del ramo, me parecía algo inútil, pero ella se miraba feliz así que podía hacer eso cuanto quisiera. Cuando por fin lo lanzo y todas pelearon por el, las humanas no tenían oportunidad la chica vampiro lo había ganado, una vergüenza para las lobas, negué. Baje a Elisa del banco, planee llevarla a la mesa principal para cenar y brindar, pero ella se sentó en el banco, estaba confundió ¿aún no terminaba esta cosa?

Mi Destino... Una elecciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora