45. ❝Almacén❞

172 40 4
                                    

— ¿Kdramas? — Ink asintió removiendo las cajas y dando un vistazo el interior.

—Ccino está obsesionado con ellos, siempre creí que sería de los que veían series románticas y fantaseaban con su romance de oficina.

— ¿Y no?

—Pues...Tiene una obsesión con los dramas apocalípticos, yo no sé si también fantasea con ellos. —Se encogió de hombros. 

— ¿Estas hablando de mí? 

— ¡...! — Ambos giraron sobresaltados por la repentina presencia de Ccino, este sonrió y encendió la luz.

— ¿Por qué están contando en la oscuridad? Qué miedo. 

—Toma, llévate estas cosas. — Ink le extendió una caja llena cargada y Ccino se tomó su tiempo para sostenerla pues sus ojos estaban puestos sobre el asiático que acompañaba al albino. 

—Qué bueno que pudiste venir, Error. —Ink dejó de inspeccionar el resto de las cajas para prestar atención a las palabras de su amigo, presentía algo extraño desde el momento en que le pidió que invitara a sus amigos para que los ayudaran en el evento solo unos días después de que le contó de su reencuentro con Error y ahora esto...—No es un evento muy grande, pero igual atrae mucha gente, un par de manos extras nos servirán de mucho. 

— ¿...? — Ink arqueó una ceja sin hacer ningún esfuerzo en ocultar el recelo hacia su amigo, quien fingió no darse cuenta. 

—Por cierto, me alegra que finalmente nos conozcamos en persona, sabrá Dios cuando es que Ink pensaba presentarnos — El susodicho puso los ojos en blanco acompañado de un largo suspiro. —, solo tenía vagas descripciones tuyas y no soy muy creativo al imaginar rostros así que...

—...Ccino, ¿no tienes que ir alimentar a los gatos o algo?

—No, eso lo hice en la mañana. — Ink hundió el rostro en el hueco de dos cajas apiladas, sentía la mirada curiosa de Error quemándole la nuca. —Ink habla mucho de ti, todo el tiempo-

—Diooos santo...— Chilló Ink. —Fuera de aquí. 

— ¡Jaja, está bien, pero enciendan la luz! 

—...— Finalmente, con su partida ambos chicos quedaron sumergidos en silencio, Ink estaba seguro de que su rostro estaba demasiado rojo, pero no podía quedarse oculto entre las cajas para siempre. Salió de su escondite dando un rápido vistazo al asiático para comprobar la situación. —...¿Qué? 

La línea fina formada por sus ojos provocada por la sonrisa coqueta que empujaba sus mejillas hacía que a Ink se le pusiera la piel de gallina. — ¿Hablas sobre mí? 

— ¡...! — Mordió sus labios volteando los ojos. —Solo un par de veces...

— ¿Cosas buenas? 

— ¿Qué? ¿Querías que dijera cosas malas? — Error rio alzando los hombros. — ¿Querías que te funara en Twitter como a Reaper? 

— ¿Hmm~? Probablemente saldrías funado tú. 

—Muy probablemente sí. 

—Si te funaran...yo te defendería. 

— ¿A poco sí~?

—Claro que sí. 

—...Yo también. 

Yo te trataría mejor || ErrorInkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora