38. ❝Dame un respiro❞

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Ink se columpiaba lento, sus pies no tocaban el suelo y tenía a Nightmare sujetando las cadenas del columpio desde atrás. Se había perdido de la conversación desde el principio y solo regresó a ella cuando Killer pareció terminar de contar su relato y rieron, el olor a cigarro lo picó la nariz y estuvo a punto de estornudar, pero logró contenerlo. 

Quería estar en silencio y no llamar la atención esta vez. 

—Dame un poco. — Escuchó a Nightmare hablar y capturó de reojo el momento en el que Cross y él compartían el mismo cigarro. Este sería un momento adecuado para estar celoso, pero no lo estaba.

— ¡Ahora que me acuerdo! — Dust casi gritó para atraer toda la atención de los presentes, incluso de Ink. —Acompañamos a Ink a su casa y nos encontramos los hermanos de Geno, ¿te acuerdas? Uno de ellos le gritó cuñado~

—Ah, sí me acuerdo. — Horror le siguió y por si fuera poco entre los tres intercambiaron información de lo que recordaban, como lucían y en donde ocurrió. 

Cross se balanceó en el columpió solo para poder el rostro de Ink discretamente, parecía que el alma se le había caído al suelo y que su corazón había dejado de bombear sangre porque su rostro había perdido todo su color. Tiró el cigarro el suelo y se levantó, si quisiera podría cortar la tensión con un dedo, pero prefería irse lejos y fingir que era ciego. — ¿Ah sí? — Nightmare sonaba divertido, como si hubiera escuchado una broma graciosa, pero eso solo hacía que a Cross se le pusiera la piel de gallina. 

—Uy, se enojó~ — Las burlas de los otros tres eran como las trompetas del apocalipsis para Ink, quien trataba de no mover ni un musculo, tal vez si no respiraba se volvería invisible. 

— ¿Hace cuánto fue eso? 

—No recuerdo, ¿por qué no le preguntas~? 

—Ink. — La exigencia en su voz se sentía como una fuerte presión en su cuello. 

—Se equivocaron...

— ¿Se equivocaron? 

—No sé por qué lo dijeron...—No terminó de hablar cuando de un tirón lo arrojaron de espaldas al suelo. 

— ¡No me mientas! — Ink apenas y pudo pestañear antes de recibir el primer golpe, los minutos siguientes se basaron en buscar formas de como protegerse a sí mismo. Tenía el sabor metálico de la sangre en la boca y la escupía cuando sentía que se ahogaba. 

—Nightmare. — Cross llamó, pero su voz apenas se escucha entre los sonidos de cada golpe por lo que tuvo que subir el tono. —Nightmare. Déjalo. — Ante esto el nombrado se detuvo para echar una mirada al otro con una ceja alzada y jadeando del cansancio. —Llamarán a la policía, no quiero involucrarme en ninguna investigación. No tengo tiempo para eso. 

—Sí, yo tampoco quiero ir a prisión. 

—Déjalo así, supongo que con esto debe haber aprendido a no llevar el culo suelto. — Nightmare rodó los ojos. 

—Oye. — Pisó el hombro del chico malherido como si pisara un insecto. —Deja de llorar y vete a tu casa, no arruines el ambiente aquí. — Ink gimoteó, no podía moverse del dolor, pero eso solo molestó más a Nightmare que lo empujó con el pie bruscamente. —Rápido. — A Cross no le sorprendía lo frío que podría llegar a ser Nigthmare, estaba más sorprendido de que Ink pudiera levantarse (aunque tambaleándose) y cumpliera con la orden. Sus pasos eran lentos, los demás habían vuelto a su mundo de fantasía, solo Cross mantenía los ojos puestos en él.

No cualquiera podría levantarse luego de una golpiza así y menos teniendo el estado de salud de Ink, pero al parecer ya era resistente a los puños del hombre. 

Yo te trataría mejor || ErrorInkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora