Sigo cometiendo el mismo error, acercarme más de lo que tengo permitido, o de lo que me autoimpongo en mantener distancia. Ahora que lo tengo aun mas cerca, que tengo mas motivos para que pasemos tiempo juntos, se me hace aún más difícil contenerme en acercarme de manera física, ya saben, de esa manera física. Me hago obviamente el desentendido. Como que no me importa que me vea con menos ropa o hasta incluso salido de bañarme. Si cree que me da cierta incomodidad puede darse cuenta de como lo veo o aun peor, creer que me incomoda porque es gay y me da cierta repulsión o desconfianza. Y eso no me lo perdonaría, que crea que me da asco o lo que sea. Cuando es todo lo contrario, saber que es gay me da la mínima esperanza de poder llegar a gustarle o interesarle. Pero la esperanza no es tan buena como siempre dicen. Uno puede sufrir aun mas por tener esperanza, por esperar algo. En el mito de Pandora, que cuando deja que salgan todos los males de ella, la esperanza es la única que queda en el fondo de la caja, por eso dicen que la esperanza es lo ultimo que se pierde. Pero si de la caja salieron penurias y males ¿Qué hacia la esperanza en ella? La esperanza puede hacer que el sufrimiento dure años, que uno no quiera aceptar la realidad y superar algo. A muchos también la esperanza los mantiene de pie, con vida. Pero en mi caso es como ambivalente. Me hace creer que más adelante, con esfuerzo, se va a fijar en mi persona de la misma manera que lo veo yo. O que el día que este con alguien más, me dolerá como nada me ha dolido en la vida. Que el golpe será peor.
Paso solo un día en el que trabajamos juntos, pero es agradable poder verlo más. En otros ámbitos. Poder pasar tiempo juntos, hacer cosas mas de amigos cercanos, o hasta podría rozar ser más de pareja. A pesar de sus quejas o parecer que no quería, en el fondo se lo veía cómodo. Cada vez se ve que le molesta menos venir a mi casa, mostrarse más vulnerable conmigo cerca. Se lo nota mas relajado, tranquilo. Y que se quede dormido en mi sillón. Dios, soy débil. No es justo. Acepto quedarse después de comer, primero a comer, después a tomar café en el sillón, tapados juntos. El paraíso. Al menos una buena relación de amigos puedo generar con este tipo de situaciones. Verlo ahí, dormido, tranquilo. Ya lo he visto dormido y relajado, pero siempre con una cara algo acongojada. Esta vez se lo veía normal, me alegre de no verlo tan mal como siempre. Se me cruzo por la cabeza ir hasta la casa, abrir y dejarlo en su pieza, pero se me hizo invadir mucho su espacio sin su permiso. Asi que termine optando por una decisión un tanto más egoísta. Lo destape, lo cargue a lo princesa con el mayor cuidado para no despertarlo ni hacerle mal. Que bueno que doblo su tamaño y tengo fuerza. Porque, aunque pese según él solo cincuenta kilos o menos, en peso muerto es mas complicado. Encima pareciera que se me derretía tratando de agarrarlo. Lo lleve hasta mi pieza, le saque las zapatillas, me dio mucha vergüenza, pero también el pantalón, ese ajustado que suele usar no debe ser cómodo para dormir. Se me cruzaron demasiados pensamientos indebidos en ese momento, como no, si le estaba sacando parte de la ropa. Mi primer pensamiento fue para que estuviera más cómodo, pero bueno, después se me disparo para cualquier lado. Trate de concentrarte y hacer las cosas debidamente. Cuando termine de acomodarlo, lo tape, me fui a buscar el cubre cama al living y apague todas las luces. Me cambié de ropa, puse el cubre en la cama y me acosté. Obviamente la única cosa inadecuada que hice, que como ya la había echo y no recibí represalias, lo volví a hacer, dormir abrazándolo de espalda. En la noche no hubo ningún problema, al parecer estaba bastante cómodo porque ahí se quedó. El problema fue en la mañana, igual y me lo imaginaba. Se iba a enojar por meterlo a mi cama a dormir sin preguntarle.
Cuando se levantó, obviamente me pego y me grito. Estaba completamente enojado, entre que estaba en mi cama, sin pantalones, y encima, bueno, puedo echarle la culpa a la naturaleza, pero muy en mi interior se que no fue solo una dureza por la mañana, sino por tenerlo tan cerca, apegado a mi cuerpo, con mi amigo cerca de su culo. Me da vergüenza encontrarme pensando de esa manera, me siento un degenerado vulgar. Yo no soy así. Bueno, si soy, solo que no debería. No parece la clase de persona que le guste que hablen así, el es un camionero hablando. Pero si alguien le habla así, como el acosador, no parece gustarle para nada. M hice el desentendido cuando me levanté, me puse ropa larga por el frio y me fui a hacer el desayuno, ignorando todos sus reclamos y quejas. También debería hacer algo con esto, con lo que tengo entre las piernas, dios, aun mas vergüenza me da esto. Termine dándome una ducha, no quería pensar en otro tipo de solución, no con él en la casa. Cuando me sentí mas calmado, fui a hacer el desayuno. Matías bajo al ratito, con cara bastante enojada, no lo discuto, cualquiera en su posición estaría igual o peor. Me sorprende que se quedara a desayunar incluso.
![](https://img.wattpad.com/cover/340921233-288-k528862.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Malos entendidos.
RandomEsta en el mismo universo que "Sabor a limón " pero es menos fresa la historia. Matias, un ser huraño que no le gusta que le digan que hacer o decir. Esta en su último año de la universidad y debe presentar proyectos y su tesis, quiero hacer todo so...