Tomorrow - Regulus Black

XII

Regulus no sabía el alboroto de tener que ir a King'sCross con todos ellos, parecía que se les haría tarde y si era sincero, odiaba la impuntualidad. Estaban siguiendo las indicaciones de la señora Weasley y Charlotte, que dejaran sus cosas y Ojoloco se las llevaría; irían en grupos separados para no llamar la atención.

—¡Tu abuela nos quiere dejar sordos ! —le gritó ___________ a Regulus pues debido al alboroto habían despertado aquel retrato que nadie se mutaba por cubrirla.

Él le hizo una mueca, mientras ambos se tapaban los oídos, esperando así evitar oír un poco a retrato de Walburga Black. Miró hacía abajo, notando a un perro negro que parecía un oso, quien brincaba entre los baúles para llegar hasta Harry; sintió cierta punzada de dolor y celos al notar que su padre iría a dejar a Harry en su forma animaga.

—Nosotros iremos atrás de ellos —les dijo Charlotte en voz alta cuando Harry, Sirius y la Señora Weasley se iban—. Caminaremos hasta la estación —ambos chicos asintieron con la cabeza.

Esperaron cinco minutos y fueron los siguientes en salir; fue un gran alivió el ya no escuchar los gritos de la Señora Black. ____________ miraba de reojo a Regulus que iba serio y callado.

—Tal vez se despida de ti en el anden —le murmuro.

Pero Regulus no le respondió y siguieron caminado atrás de Charlotte; no quería que alguien le dirá falsas ilusiones de que su padre se acordaba que él también regresaba a Hogwarts y no lo vería tal vez hasta las vacaciones de diciembre.

Al cruzar de manera discreta por los andenes 9 y 10, caminaron rumbo donde estaba Harry, Tonks, la señora Weasley y Sirius aún en su forma animaga.

—Ya vienen los demás —les informo Charlotte en el momento que Ojoloco llegaba con los baúles sobre un carrito.

—Todo en orden —murmuró al llegar junto a las tres mujeres—. Creo que no nos han seguido...

Regulus sin esperar a los demás, tomo su baúl de manera rápida, quería subir al tren en ese momento, mientras sentía un nudo en la garganta al notar que su padre ni siquiera se acercaba a él. ___________ tomo el suyo también de forma rápida, mientras Harry se desconcertaba al ver como seguía a Regulus, quien con la cabeza en alto y mirando al frente caminaba para subir al tren.

—No camines tan rápido —se quejo la chica, cuando lo alcanzo, ambos estaban en una de las entradas del tren con sus baúles arriba—. Regulus —lo miró preocupada—, ¿estas bien?

Esté no giraba a verla, pues con cada paso que había dado evitaba llorar y si ella lo veía así, no duda que lo haría.

—Cariño —habló Charlotte desde el anden—, ven a despedirte.

La chica miró a fuera del tren, los demás habían llegado por fin junto con su padre y el señor Weasley, tomando sus baúles y empezando a despedirse. Entonces sin decirle algo a Regulus, lo tomo del brazo y lo jalo para que también fuera a despedirse, esperando a que Sirius no fuera tan estupido y se despidiera de su hijo.

Regulus entonces empezó a ver a los demás chicos despidiéndose de los señores Weasley, Ojoloco, Tonks, Remus y Charlotte; miró a su alrededor, en realidad los alumnos que seguían en el anden se despedían de sus padres porque el tren estaba a punto de partir.

Miró a Sirius, quien le daba empujones cariñosos con su cabeza a la pierna de Harry, haciendolo sentir mal. Pensando en qué tal vez si hubiera sido un buen hijo desde un principio, Sirius se estuviera despidiendo de él.

—Ten un buen viaje, Regulus —le dijo la Charlotte con una sonrisa, atrayendo su atención—. ¿Podría darte un abrazo?

Este se sorprendió con aquella pregunta, pero asintió levemente con la cabeza y dejo que los cálidos brazos de de Charlotte Manson lo envolvieran, haciendolo sentir bien, como si alguien le importara que no lo vería en meses.