XLVII

608 78 11
                                    

El martes por la mañana, ___________ tenía sueño, no quería levantarse, pues la noche anterior había regresado tarde de aquella reunión del Club de las Eminencias; si era honesta le era un poco entretenidas, solo por el hecho de tener a Blaise con ella y poder criticar a quienes le caían mal de aquel grupo, siendo fans número uno en tenerle odio a McLaggen, quien soltaba cada comentario que habían decidido en lanzarle hechizos confundus cuando trataba de hacerse el importante, dejándolo en ridículo, como en la noche anterior, donde sin querer había derramado su bebida en su pantalón, aparentado que se había orinado.

Dio la vuelta en su cama, tapandose por completo con su cobija y pensando si podría faltar solo por hoy a herbología, fingir que estaba enferma, pero todo se fue al carajo cuando escucho la puerta de su habitación abrirse y sentir como alguien se tiraba sobre ella.

—¡Levantate! —le dijo Pansy.

—Déjame en paz —se quejó la chica mientras peleaba para que su amiga no le quitara las cobijas—. Di que estoy enferma.

—No voy a dejar que me dejes sola con Zabini —se quejo, mientras ____________ la miraba—. Draco no me habla después de ir a reclamarle por cómo te hablo, Stanley tampoco parece que se ha levantado y Regulus solo está con nosotros por ti. Así que no me dejes sola. Por favor —le imploró.

—Bien —respondió cansada—. Adelante en lo que me arreglo.

—Eres la mejor —sonrió y la abrazó rápido, para luego irse.

____________ bostezo y cerró los ojos, cinco minutos más no se le hacía mal, o eso pensó, cuando al despertar noto que solo tenía 15 minutos para llegar a Herbología. Tomó su uniforme y se lo puso rápido, amarrando su cabello en una sencilla coleta, agarró su mochila y salió de su habitación, topándose a Stanley en la entrada de la sala común.

—¿También se te hizo tarde?

—Si —respondió mientras intentaba amarrarse la corbata, pero parecía tener un espasmo en su mano izquierda que no lo dejaba.

—Ven acá —dijo la chica.

La castaña le hizo el nudo a su corbata, olvidando por completo que tenían que ir a clases, ya que se detuvo a mirar a Stanley; tenía ojeras horribles, incluso hasta ese momento noto que estaba más delgado.

—¿Estas bien, Stanley? —preguntó ella.

—Lo estoy —respondió, aunque parecía evitar hablarlo—. Vamos o llegaremos tarde.

Tomó la mano de la chica e hizo que empezaran a correr rumbo a los invernaderos.

Regulus miraba constantemente la puerta del invernadero, pues la profesora Sprout ya los habían dejado ingresar, pero no veía por ningún lado a ____________; en el desayuno Pansy le dijo que se había despertado tarde y no tardaría en llegar, pero no lo hacía.

Pensó que tal vez si le había ganado el sueño, así que solo haría haría equipo por aquella vez con Zabini y tal vez Pansy, que parecía indecisa estar al lado de Draco.

—Bien, chicos —empezó hablar la profesora en el momento en que iba a cerrar la puerta, pero esta fue detenida por una mano.

—Lamentamos llegar tarde —hablo Stanley, que intentaba recuperar el aire, al igual que ____________—. ¿Podemos pasar?

Todas las miradas estaban en ellos, sobre todo por el hecho que venían de la mano, cosa que noto la chica y soltó a Stanley para entrar al invernadero.
Se puso al lado de Regulus, quien miró a Stanley de forma seria y luego a ___________, quien le regaló una pequeña sonrisa.

—¿Por qué venían juntos? —preguntó Zabini cuando empezaron

—A ambos se nos hizo tarde —respondió la chica mientras se ponía los guantes como los demás, ese trimestre trabajaría con retorcidas cepas de snargaluff—. Y no como lo piensas asqueroso —dijo al ver su rostro.

Tomorrow - Regulus BlackDonde viven las historias. Descúbrelo ahora