Pasión Homicida (ilemma) Terminada

Capitulo 9

Sorpresa. ¡No Existes!

Nos hallábamos sentados en la sala, yo me sentía impaciente porque Boris se había puesto a "conocer" a Chris y Rachel y ahora ellos le platicaban lo ocurrido en la Morgue el día de hoy.

- ¿El hombre le dijo...? – Boris parecía contrariado.

-Queen –asintió Rachel-. O eso escuchó ella.

-Sí, bueno –interrumpí-. Boris, tenías algo muy importante que decirnos, ¿no podrías...?

-Calma Boss, todo a su tiempo –me dijo apacible y sacándome de mis casillas como solo él sabía.

-Ahm... aquí hay algo de refresco si quieren –ofreció Emma que venía de la cocina con una bandejita llena de vasos con refresco.

- ¡Gracias! –exclamó Rachel-. Ya estaba sedienta.

Los demás respondieron afirmativamente y todos tomaron un vaso. Yo tomé el mío lentamente.

-Gracias –murmuré.

Sonrió y fue hacia la cocina de nuevo con la bandeja vacía.

-Toda un ama de casa ¿eh? –musitó Boris antes de llevarse el vaso a los labios.

- ¿¡Qué dijiste!? –grité de repente enojado.

Mi amigo continuó bebiendo hasta dejar el vaso a la mitad, lo dejó en la mesita y me miró ladeando la cabeza.

- ¿Quién? ¿Yo?

Bufé y me recargué en el respaldo con los brazos cruzados. La cría volvió unos segundos después y se sentó en el reposabrazos que yo tenía a un lado.

-Entonces, ¿qué es lo que averiguaste?

Él se estiró un poco y se acomodó en el sillón. Lo miré ceñudo cuando se rasco la nuca con pereza.

-No sé cómo se lo tomarán, pero...

-Vamos, dinos ya –exigí sin mucha paciencia.

-Bueno –suspiró con resignación-. Busqué en la base de datos del departamento de personas perdidas si alguien había reportado a una tal Emma James, pero como supuse, nadie lo hizo.

Emma torció el gesto y miró sus tenis.

-Entonces tuve que irme un poco más a los extremos... –lo miramos sin entender-.

Quiero que sepan que no es... muy legal hacer lo que hice, pero...

-Habla... –advertí.

-Bueno... entré a la base de datos del gobierno donde tienen basta información sobre toda persona que vive en Rusia: desde nativos del país como los que extranjeros que se mudan acá.

- ¿Entraste a la...? –Christopher boqueaba incrédulo-. ¡Eso es...! Tú... ¡Podrías ir a prisión por haber hecho algo así! ¡Esa información es confidencial...!

-Chris –Rachel alzó las cejas.

quitó su cara de sorpresa y se aclaró la garganta.

-Continúa...

-Conocía las consecuencias –admitió-. Pero los únicos que sabemos que yo hice eso estamos en este apartamento. Así que espero no decidan delatarme.

-Convénceme... –dije un poco retador a causa de tanto misterio, porque sabía lo mucho que odiaba que hiciera eso.

-Siempre tan exigente, mi Boss...

- ¡Boris!

-Pues, en fin –se recargó en el respaldo-. Lo sorprendente, y por lo que decidí venir fue por lo que encontré... o más bien no encontré...