KTS ( besar a un desconocido)

CAPÍTULO 83

Me dolía la espalda como si estuviera ardiendo. Incluso llegué a pensar que sería bueno si alguien cortaba esa área por completo. Duele, Duele...

"...nte ...intentar".

Escuché una voz pero no lograba entender bien lo que decía. La agonizante sensación de dolor continuaba nublando mi mente. Quería perder la conciencia de nuevo, pero el dolor persistente me mantenía alerta. La voz se volvió más clara poco a poco.

"...Entiendo, pero ¿por qué se desmayas tan a menudo? ¿Está

realmente inconsciente?"

Era la voz de Asgail. Quizás la razón por la que su voz era más nítida ahora era porque pertenecía a ese hombre. Apenas recordé algo en mi estado confuso. Luego, la respuesta de una mujer se hizo audible.

"Esto no es solo desmayarse. Está cerca de un estado de muerte. Si esta condición se repite, el tiempo sin conciencia aumentará y morirá pronto".

Era una voz que había escuchado antes. ¿Quién era...? Mi cabeza no estaba funcionando correctamente. Solo respiraba, y Asgail habló de nuevo.

"No quiero que muera. De alguna manera, sálvalo. No importa cómo esté su condición".

"De todos modos, si lo dejas así, morirá pronto. Hasta ahora ha estado vivo gracias a lo que ha aguantado".

"Así que serás tú quien lo trate. Si él muere, tampoco tendrás vida".

Ante una voz cínica, la otra parte vaciló y respondió.

"...Haré lo mejor que pueda, Su Alteza, pero debes tratar al omega con extrema precaución, como si estuvieras manejando el vaso más delgado del mundo. Sus heridas son muy graves, y además por no poder continuar el tratamiento, está en un estado bastante desastroso. Después de todo, he visto a algunas personas que fueron azotadas, pero esto es algo serio. Incluso si lo curo con mi mejor esfuerzo, es probable que queden cicatrices graves. Además, los efectos secundarios..."

"Meisa".

"Sí, Su Alteza".

Meisa respondió de inmediato con una voz tranquila. Fue entonces cuando me di cuenta de que esa voz pertenecía a Meisa.

"Mi orden es simple y clara, sálvalo. No quiero escuchar nada más".

"Sí, Su Alteza".

Meisa respondió en voz baja. Hubo un breve silencio. Justo cuando mi conciencia estaba a punto de desvanecerse nuevamente, la voz de Meisa resonó desde más allá.

"Con todo respeto, Su Alteza, ¿podría saber por qué este omega es tan necesario? Si lo menciona, tal vez podríamos buscar otro omega como reemplazo..."

"Bueno, ¿hay algo así?"

La voz sarcástica del príncipe heredero interrumpió sus palabras. Meisa preguntó de nuevo.

"¿Es porque el omega es dominante?"

Asgail no respondió de inmediato. En un silencio pesado, sentí el deseo de huir, pero no podía mover ni un dedo. La voz de Asgail sonó lentamente.

"Sin él, no puedo dormir bien".

Meisa hizo un sonido ahogado como si estuviera sorprendida. Asgail continuó con un tono sarcástico.

"A pesar de que muchos médicos intentaron todo tipo de medicamentos y trucos, al final, este modesto omega lo hizo. ¿Lo entiendes? La feromona de este omega no es diferente de los demás. De hecho, las feromonas iban y venían a su antojo, e incluso si vierto feromonas, no hay ciclo de calor. Muy divertido".