KTS ( besar a un desconocido)

CAPÌTULO 25

"Necesitamos un medio de transporte".

Dijo Kamar con un rostro serio, y lo mirè sorprendido. Cuando volví en mí, me di cuenta de que había escuchado palabras sorprendentes. Lo más extraño fue que, de alguna manera, ya había aceptado la idea. Al darme cuenta de la realidad, caí en pánico.

Kamar notó mi tardía comprensión e Intentó tranquilizarme con un beso y una sonrisa tierna, pero no podía relajarme tan fácilmente.

"No te preocupes, todo saldrá bien".

"Donde sea que vayamos, será lo mismo. No cambiará por ir a la ciudad... Además, no es como si dejara de ser un omega".

"Pero nadie sabe que eres un omega", añadió, señalando la verdad. Aunque solo unas pocas personas sabían la verdad, incluido mi tío, que era uno de los pocos que conocía la verdad, sería difícil que me protegiera adecuadamente. Esa era la razón por la que me escondieron aquí.

"Estoy seguro de que no es diferente en otras ciudades... Estoy seguro de que es peor en la ciudad. He oído que capturan Omegas y les hacen cosas terrible".

"¿Cosas terribles?"

Encogí los hombros, sin saber con certeza. Sin embargo, dada la profunda contemplación y las advertencias de mi madre, algo terrible debía haber sucedido. Aunque solo unas pocas personas, incluido mi tío, sabían la verdad aquí, seguramente no sería capaz de protegerme adecuadamente. Aún vacilando, abrí la boca para hablar.

"Incluso si vamos a otra ciudad... probablemente será igual. ¿Hay realmente un lugar que nos acepte?"

"Seguro que lo hay", respondió Kamar con confianza. A pesar de mi escepticismo, sus palabras me hicieron querer creer en ellas.

"Entonces, me gustaría...". Antes de que pudiera terminar la oración, Kamar me interrumpió.

"Si no hay, lo crearé".

Su declaración provocó una risa y pregunté: "¿Cómo?".

"De la manera que desees, lo que sea".

El amor que sentía por él inundó mi pecho. Abrí los labios y dije: "Solo te quiero a ti".

Kamar también sonrió y susurró: "Yo también".

En sus brazos, sentía que podía encontrar seguridad frente a todo el mundo. Así que, quería quedarme atrapado en esos brazos para siempre. La idea de ir a otro lugar era inimaginable para mí. Cerré los ojos y lo abracé.

Confía en Kamar, pensé. No podía imaginar vivir sin él. Estar lejos de Kamar era insoportable.

"Estará bien, lo superaremos", me dijo Kamar al notar mi vacilación. Intentó reconfortarme con sus palabras, y a pesar de todo, quería creer en él.

"Te amo", dije.

Las palabras parecían contener todo lo que no podía expresar con gestos. Kamar respondió con una suave sonrisa.

"Yo también te amo".

Con esas palabras, nos fundimos en un beso lleno de promesas y amor, listos para enfrentar el futuro juntos, sin importar lo que pudiera deparar.

***

A medida que pasaba el tiempo, Kamar se movía de manera inusualmente ocupada, diferente a su rutina habitual. Mientras yo trabajaba en el tapiz, lo observaba vagar por aquí y allá como si estuviera investigando algo, sumergirse profundamente en sus pensamientos y tomar notas de vez en cuando.