KTS ( besar a un desconocido)

CAPÍTULO 90

Sus dedos que bajaban lentamente por mi espalda hacían que todo mi vello corporal se erizaran. El miedo me recorrió la espalda junto con los escalofríos. Sentí que mi columna vertebral se tensaba, y a punto de derrumbarme, intenté fortalecer la mano apoyada en la pared. Sin embargo, debido a la humedad en la superficie de mármol, mi palma resbalaba una y otra vez. Al volver a poner apresuradamente la mano en su lugar, de repente sentí malestar detrás de mí.

La temperatura corporal del cuerpo que se acercaba rápidamente se hacía evidente. No sabía si era miedo o alguna otra razón, pero mi corazón latía descontroladamente y mi boca estaba completamente seca. Mientras temblaba, la voz baja de Asgail llegó a mí.

"Orinando en cualquier lugar, ¿No es este comportamiento propio de un perro vagabundo?"

Mi cuerpo comenzó a temblar más fuerte. Abrí la boca, pero solo después de varios intentos pude decir algo.

"...Lo siento, hice algo mal..."

Fue difícil ofrecer una disculpa, y ni siquiera pude terminar de hablar. Mi mente se volvió distante debido al aire caliente y la respiración agitada. Asgail habló como susurrando.

"Si hiciste algo mal, deberías recibir un castigo".

"...!"

Sorprendido, me sobresalté. ¿Un látigo? ¿Estaba planeando golpearme de nuevo? Entonces tal vez por eso revisó mi espalda. Debería haber pedido clemencia antes, o incluso ahora.

No podía articular palabras.

Me sentía avergonzado de mí mismo, que solo temblaba. Preferiría desmayarme, pero eso tampoco era fácil.

Sentí el calor de su cuerpo detrás de mí. Cuando Asgail cubrió completamente mi cuerpo, su aliento descendió sobre mi cabeza.

"Solo tienes huesos, tus nalgas son tan pequeñas y, bueno, no solo tus nalgas son pequeñas..."

Se apoyó contra la pared y superpuso sus manos, ocultando completamente mi mano. Inclinó la cabeza y mi reacción ante su contacto no le importó. Su voz baja continuó cerca de mi oído.

"¿Realmente hay un omega tan despreciable, miserable y patético?"

Cada vez que hablaba, su aliento rozaba mi clavícula. Ahora, debería suplicar, admitir que hice algo mal.

¿Qué hice mal?

De repente, quedé aturdido por la pregunta que surgió. No lo sé. Parpadeé rápidamente, pero aún así no encontré respuesta.

¿Qué pude haber hecho mal?

En mi confusión, Asgail respondió la pregunta que me vino a la mente.

"Ni siquiera hueles, ni estás mojado. Además, lloras por cualquier cosa. ...Y ahora, incluso orinas en cualquier lugar".

Asgail extendió una mano y tocó la pared. Instantáneamente, agua fría empezó a caer y, sorprendido, grité. Me di cuenta tarde de que había presionado el botón de la ducha.

A pesar del agua fría que caía sobre mí, no había escapatoria. Me quedé atrapado en los brazos de Asgail sin poder moverme mientras el agua me empapaba.

Está caliente.

Ya sea ahora o antes, su temperatura corporal, mucho más cálida que la mía, estaba en contacto con mi espalda. Tenía la urgencia de frotarme contra él para escapar del frío. Pero no podía hacerlo.

No puedo enfriar a Kamar.

Traté de alejarme, pero después de que Asgail quitó la mano que había presionado el botón, de repente me rodeó la cintura. Sorprendido, no pude gritar y fui sujetado por él.