Mi propia historia de Amor (Jenlisa)

Más recuerdos

POV JENNIE

Nos encontrábamos dando un paseo al aire libre, tomamos mantas, una cesta y comida. Haríamos un picnic cerca del lago.

-Es muy hermoso- habla Rose en cuanto llegamos al sitio.

-Demasiado- le respondo embobada viendo este.

-Si, muy bonito y todo, ahora ayúdenme con algo- nos dice bufando Jisoo.

-Es tu castigo por dejarnos afuera- le responde Lisa colocándole la cesta en el cuello a Jisoo.

Se veía muy graciosa, en una de sus manos cargaba las mantas, en la otra la comida, mientras abrazaba una pequeña bocina, y en su cuello la cesta.

-Ya, baja todo- le ordene.

Hizo lo que le dije, mientras me daba una mala mirada.

-Pero vas a ver, me voy a vengar- dice acostándose arriba de las mantas.

-Las vas a ensuciar!- le gritó.

-Mas sucias con tu culo puesto en ellas!-

-Idiota!-

-Estupida!-

-Chicas dejen de pelear, mejor disfrutemos de este hermoso momento- menciona Rose.

-Si chicas, vamos nini, tomemos fotos-me jala Lisa a su lado.

-Bien..- le digo cediendo dándome la vuelta.

-Se nota quien es la pasiva!- escucho a mis espaldas.

-Repitelo, atrévete- le digo volteandome lo más rápido que puedo.

-P-A-S-I-V-A- me deletrea cada maldita palabra.

-Te voy a matar Jisoo!-le digo intentando correr hacia ella.

Pero es en vano porque Lisa me abraza por atrás evitando que me lance a Jisoo.

-¡Maldita sea ya!- nos grita Rose.

-Es ella!- decimos al unisono Jisoo y yo.

-Paren de una vez, vamos a disfrutar, y si no quieren estar aquí las dos,mejor Rose y yo nos vamos- demanda Lisa.

Después de unos minutos, y de muchas malas miradas, Jisoo es la primera en desistir.

-Bien...-

-Pues ya que- le digo comenzando a destender las mantas.

Esa tarde fue una de las más bonitas que tuvimos, a pesar de las peleas constantes que tenía con Jisoo, fue perfecto, comíamos, reíamos y disfrutábamos.

Jisoo y Lisa habían decidido ir a nadar un poco al lago, mientras yo estaba con Rose cuidandolas de cualquier cosa.

-¿Alguna vez has peleado con Jisoo encerio?- me pregunta Rose.

-Nunca, no se porque razón no puedo molestarme con ella por más de 2 horas- le digo mirando en dirección a donde están ahora.

-Eso es bastante lindo- me alaga.

-Pues depende, a veces me saca de quicio- le digo recordando lo de hace un rato.

-¿Y tú?- le pregunto.

-Una vez nadamás, tanto fue el enojo que le dejé de hablar por 8 meses- me dice tomando una botella de cerveza.

-¿,8 meses?- le digo sorprendida.

-Asi como escuchaste, 8 meses- toma un pequeño sorbo de este envase.

-¿Y porque?-

En verdad me intriga saber el motivo, las veo muy unidas, podría jurar que hasta eran novias si no las conociera.