Los días habían pasado, en los cuales las cosas habían avanzado, mamá había renunciado a su puesto de maestra, alguien más la cubriría. Rick había hablado con Jay y ahora era uno de nosotros, con eso y que habían acabado con los salvadores estábamos más tranquilos.Yo me encargaba de cuidar a Lisa y Judy junto a Carl, Glenn me había pedido que cuidara de Maggie de vez en cuando. Me sentía encerrada, pues tenía ya algunos días sin salir, y mamá y papá no me habían dejado ir a confrontar a la base de los salvadores, necesitaba algo de aire salvaje; por lo que dejé a Lisa con Judy, tomé mi arco y trepe la muralla sabiendo que Carl me seguía.
Comenzaba el invierno por lo que fui abrigada, cuando estuve lo suficientemente lejos de Carl me puse detrás de un árbol, amaba asustarlo así.
—¡Boo!—lo asusté y comencé a reír mientras este rodaba los ojos—Anímate pecas, tenemos días sin salir, ser padres es algo agotador—dije dando vueltas sintiendo el aire mover mi cabello.
—Te ves increíblemente sexy así—me dijo mientras se acercaba a quitar el cabello de mi cara. Ahora unas trenzas pequeñas forradas de hilos decoraban algunos mechones de mi cabello, pues Lisa sabía cómo hacer esas trenzas—Nunca te peinas, te quedan bien esas mechas de colores—se burló tomando una de mis trenzas entre sus dedos para luego poner una mano en mi mejilla—Te amo—me abrazo por la cadera, pegando mi cuerpo al suyo.
—Te amo—mire su ojo para después darle un beso—No teníamos tiempo para nosotros, desde que Lisa ha tenido pesadillas no hemos tenido privacidad—le dije separándome sonriendo maliciosa.
—Busquemos un lugar donde no haga frío y podamos estar seguros—tomo mi mano y comenzamos a caminar.
—¿Qué opinas sobre lo que está pasando?—pregunté curiosa de su respuesta.
—Pues supongo que está bien—dijo sin dejar de caminar—Hiltop nos da provisiones a cambio, Carol y Maggie no murieron cuando las secuestraron, así que supongo que la amenaza terminó, por eso Carol se fue—me miró y asentí.
—Me hubiera gustado ir a ayudar—confesé mirando mis botas.
—Lo sé, pero pudiste haber sido secuestrada como Carol y Maggie—me miró—Las cosas pasan por algo—me animo.
Nos acercamos a un pequeño pueblo, entramos a varias tiendas, entramos a una joyería pero esta parecía estar completamente vacía. Cuando entramos a una tienda de autoservicio, matamos a tres caminantes, encontramos una mina de oro; había una caja de chocolates entera.
—Buscábamos cobre y encontramos oro—un emocionado Carl se acercó a la caja mientras yo me sentaba en el mostrador y abría una barra de caramelo.
—Dios nos miró a los ojos—me burle.
—Hablando de ojos—comenzo mientras yo masticaba mi caramelo—Ya me siento del todo cómodo con mi ojo—me dijo y sonreí.
—Eso es muy bueno pecas—hablé—Ve el lado positivo ahora solo tendrás un ojo para mí—le sonreí como niña pequeña y este solo negó con la cabeza mientras se acercaba a mi.
—Eres un caso perdido—dijo renegando.
—Pero te encanto—le dije una vez que se acercó a mí y ponía sus manos en mis piernas.
—Me encantas—olfateó mi cuello—Me encanta tu aroma, tus ojos, tu voz—me beso el cuello y deje caer mi cabeza hacia atrás.
La cosa subió de tono, ahora nos encontrábamos completamente expuestos. Carl me embestía con rapidez, yo dejaba besos en su cara y cuello. Mi espalda chocaba con una pared, de vez en cuando dejábamos escapar risas, pues en cualquier momento algún caminante o persona podría atacarnos, estábamos a punto de llegar al límite cuando la puerta del establecimiento fue abruptamente abierta.

ESTÁS LEYENDO
Invisible String
Fiksi PenggemarLexie Dixon trata de sobrevivir al mundo apocalíptico, donde le ocurrirán cosas que jamás se imaginó que podrían ocurrir. Encontrará amigos, quizás encuentre a su persona indicada. Pero sobre todo... se enfrentará a un mundo totalmente diferente al...