Laevoneus: Daniel (Reino Bruma)
Laevoneus, el mundo gemelo, desconocido para el príncipe, pero solo para él. Pasaron varios días mientras cabalgaban hacia el sur, hasta que el príncipe preguntó a su caballero.
- Miguel – dijo con seriedad Iván, viendo de frente el camino por el que seguía su corcel.
- Dígame príncipe - respondió respetuoso.
- Dijiste que habías estado aquí antes, ¿Cómo es eso? Yo sabía que no habías nacido en Renacimiento, pero no sabía que no habías nacido en Dextroneus.
- No pensé que fuera importante señor, de hecho, no pensé que regresaría, en realidad es una larga historia.
- Me encantaría escucharla - le dijo a su amigo.
- ¡Estamos cerca! – gritó Daniel y todos voltearon a verle - El Reino de Bruma, el lugar donde reside una de las llaves, puedo sentirlo, pero, como ven, tenemos que adentrarnos a los bosques, está anocheciendo y es peligroso, así que, mejor será que acampemos aquí.
- Bien, si tú lo dices – decía Miguel – aunque no sé a qué clase de peligros te refieres, ¿Qué hay en ese reino que pueda ser tan peligroso? Se supone que ahí es el lugar de protección de los animales – dudaba el caballero.
- Pero, los espíritus animales no se fían de cualquier humano – interrumpió Eimi, la bruja, con seriedad – puedo sentir inestabilidad, no es seguro entrar ahí de noche, los espíritus están inquietos.
- ¿Escuchas a los espíritus? – preguntó Ivan
- Sí, gran parte de mi poder reside en invocar y escuchar a los espíritus, ellos me permiten ver el futuro y parte de mi magia viene de ellos.
- Descansen, yo me quedaré vigilando – les interrumpió Daniel, el sol ya se había ocultado.
Después de unos minutos, Miguel había prendido la fogata, mientras todos habían acomodado sus telas en el suelo, Eimi invocaba un hechizo protector contra el viento y el frío, así lo habían hecho por las últimas noches. Daniel se alejó del resto y se internó en la oscuridad, Miguel lo siguió con la mirada hasta perderlo de vista.
- Es extraño, ¿verdad príncipe? - dijo Miguel.
- Ya no es del todo humano, es claro que no siente las cosas de la misma manera que ustedes – les dijo Eimi mientras parecía que buscaba algo a los alrededores.
- ¿Qué nosotros? – le preguntó Iván - ¿y qué hay de ti?
- Yo, entiendo al chico, como bruja e invocadora de espíritus, hay muchas cosas que han dañado mi alma.
- Es solo que somos tan opuestos – dijo Iván mientras una esfera de luz comenzaba a producirse en su puño, girando ávidamente, con los días usaba más sus poderes – yo recién empiezo a entender los poderes de la luz y el parece vivir siempre en...
- La oscuridad – completó Eimi
En esos momentos Daniel se había alejado demasiado de sus compañeros, pudo ver a lo lejos como encendían su fogata, cuando perdió de vista el rayo de luz y un grupo de árboles se encontraban a su alrededor una enorme nube negra se posó por el lugar y cubrió todo, la oscuridad parecía formar un torbellino alrededor de él, era justo como el día que Ivan y los otros lo habían conocido.
- Entonces debe ser de ese clan al que llaman "Minor" – siguió Miguel que continuaba la conversación a un costado de la fogata.
- ¿Clan Minor? – preguntó Iván confundido.
- Así como existen clanes de lineas que pertenecen a la realeza, como el de Renacimiento, el de usted, y que son manipuladores de la luz, los Minor en Laevoneus eran famosos por la manipulación de las fuerzas de la oscuridad.
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La Leyenda de Papillon
FantasíaLos mundos gemelos viven en armonía, hasta que un poderoso hechicero oscuro pone en peligro el equilibrio, Alice la princesa de Dextroneus ama en secreto a Iván el príncipe de Renacimiento, pero su amor se verá en peligro al ser separados por el ter...