CAPÍTULO 39 - UNA ÚLTIMA ALA

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Dextroneus: Eimi (Templo de las Sombras)

Renacimiento se encontraba de luto, por las escalinatas del castillo, un par de hombres vestidos en armadura, llevaban una caja dorada, que contenía las cenizas del rey Sarim, las llevaban a la parte posterior del castillo para darles sepultura.

Una vez ahí, Iván, que se encontraba vestido con un traje de gala lanzó un rayo de luz al cielo, que explotó con una expresión de múltiples colores, la caja descendió unos metros bajo la tierra, mientras Iván decía unas palabras.

- Hoy, es uno de los días más tristes de Renacimiento, pues hemos perdido a nuestro más noble gobernante – Iván omitió los detalles del enfrentamiento y solo pudo señalar un culpable – Adonis, el rey absoluto, es quien estuvo detrás de todo esto – la población que miraba el funeral quedó atónita – hoy es un día oscuro, pues el reino de la luz me recibe a mí, como su nuevo rey, y lo primero que debo anunciarles es, que la guerra se acerca y Renacimiento tendrá que pelear contra Capital, por el futuro de los mundos gemelos – una lápida se levantó en la tierra, Iván lanzó otro rayo de luz para dejar encendida una larga antorcha sobre la tumba, un sirviente se acercó y colocó la corona dorada que antes había usado Sarim en la cabeza de Iván, un nuevo rey había sido coronado y una terrible guerra estaba a punto de comenzar.

Habían pasado los días en la Ciudad de la Luz, la princesa Alice de Dextroneus había desaparecido, parece que el grupo estaba fragmentado, Will decidió que era mejor quedarse en la ciudad para ir a la guerra, no se sabia del paradero de Rumsey, Gabriel ni Enix. Eimi, la bruja, también desapareció en la noche que Alice se había ido. 

Iván había mandado soldados a buscar a la princesa, pero por días no recibió noticias. 

No tan lejos de ahí, una desolada Alice, caminaba internándose en los límites de Renacimiento, apenas había dormido, o comido algo, se veía muy agotada, de pronto, se escuchó el relinchar de un caballo, Alice intentó esconderse, pero parecía que el ruido del animal sabia donde se encontraba, de repente una figura montada en caballo apareció.

- ¿Eimi? – dijo Alice al ver a la bruja, la cual extendió su mano, sobre aquel caballo. 

- Déjeme acompañarla princesa - dijo Eimi sonriendo, llevaba otro caballo a cuestas, jalado por el suyo, para que Alice pudiera montarlo - la he buscado por días, traigo suficientes víveres para la parte final de su viaje, y transporte - Eimi ofreció agua a la princesa la cual tomó vigorosamente al destapar el recipiente, finalmente comenzó a hablar.

- No, es hora de que continúe este viaje sola - dijo Alice, Eimi bajó del caballo y entre las cosas que traía ofreció algo más, una espada, el arma de su padre, Gautier.

- Déjeme ayudarla, - dijo Eimi ofreciéndole la espada - he visto el futuro, sé donde está la última ala – Alice no dijo nada, tomó el arma de la mano de Eimi, luego ambas subieron a los caballos, de un golpe, el corcel salió despedido a su destino final.

De regreso a Renacimiento, Iván se encontraba en la misma habitación que Miguel, Will y Tony. No había rastro de Alice ni de Eimi.

- ¿Qué haremos ahora? – preguntó Will con los brazos cruzados.

- Primero debo ir a recuperar a Alice – dijo Iván muy serio.

- Iván – interrumpió Miguel a quien no le agradaba la idea – noticias llegaran a Capital de que has declarado la guerra, debes organizar al ejército.

- Tú te quedaras a hacer eso, junto a Tony, regresaré en cuanto encuentre a Alice, es Papillon a quien debemos proteger.

- ¿Y cómo piensas encontrarla? No sabemos a donde fue – insistía Miguel a quien la idea se le hacía absurda.

La Leyenda de PapillonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora