ALONNE 2: 𝑬𝒍 𝒓𝒆𝒈𝒓𝒆𝒔𝒐 𝒅𝒆 𝑽𝒊𝒗𝒊𝒂𝒏 𝑪𝒐𝒍𝒆𝒎𝒂𝒏

~𝘾𝙝𝙖𝙥𝙩𝙚𝙧 𝙤𝙣𝙚 𝙝𝙪𝙣𝙙𝙧𝙚𝙙 𝙖𝙣𝙙 𝙛𝙞𝙫𝙚𝙩𝙚𝙚𝙣~

𝘊𝘳𝘦𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘵𝘦 𝘦𝘹𝘵𝘳𝘢𝘯̃𝘦́ 𝘱𝘰𝘳 𝘴𝘪𝘦𝘮𝘱𝘳𝘦, 𝘤𝘰𝘮𝘰 𝘭𝘢𝘴 𝘦𝘴𝘵𝘳𝘦𝘭𝘭𝘢𝘴 𝘦𝘹𝘵𝘳𝘢𝘯̃𝘢𝘯 𝘢𝘭 𝘴𝘰𝘭 𝘢𝘭 𝘢𝘮𝘢𝘯𝘦𝘤𝘦𝘳

Narrador omnisciente

Cualquiera creería que aquella niña que era media hermana de la pelirroja sería igual a su madre, o a Vivian.

Pero aquella niña era identifica a su padre, su mirada fría, sus ojos marrones, sus rasgos, ella era más parecida a el que a su madre, tenía pocas parecidas a su madre, una de ellas era el lunar que yacía en su pecho...El mismo que tenía su hermana, una demostración de que estaban más unidas de lo que esperaban y deseaban.

Pero ellas nunca lo supieron, apesar de tenerse frente a frente, el odio les ganaba, ella era mala, por lo que vivió de pequeña, y ya todos sabían eso, pero nunca se imaginaría que la persona a la que tanto se esforzó en matar sería su media hermana, ella siempre supo que la mujer a la que llamaba madre no era su verdadera madre, pero su inocencia cuando era niña le ganó, y por eso se volvió así.

...

Una joven pelinegra gritaba mientras se esforzaba porque Jesús la soltara, el cual la vio, como si el destino quisiera que les dijera la verdad, estaban entrando a Hilltop.

-¡SUELTAME IDIOTA!- Gritaba la joven histérica mientras golpeaba todo, todos la miraban extrañados, mientras que Jesús no podía creer lo que el mismo destino estaba haciendo, estaba uniendo a dos personas que nunca quisieron ser algo, lo única que había entre ellas era odio.

Ahora sabían que el odio no era lo único que las conectaba, si no también la sangre, la sangre de su madre, de Emily Coleman.

La sangre las unirá, pero el destino y la malicia las separara.

-¡PUTA MADRE, QUE ME SUELTES MUGROSO IMBECIL!- gritaba, de repente, Jesús le colocó una bolsa sobre su cabeza, haciéndola gruñir, Jesús, aún sin saber lo que había pasado entre esas dos hermanas se dirigió a la enfermería, tenía muchas cosas que contarle a Vivian, pero también tenía que decirle todo lo que había descubierto.