Me quedo petrificado, una clase de sudor frio recorre mi espalda. Siento que mi columna se tensa y mi cerebro se llena de un liquido repugnante. No puede estar pasando eston, no puedo ver esto, doy un paso hacia el interior. No puedo estar aqui y mucho menos con Daniel a mi lado y sin camisa.
Hay un sofa de piel negra en el costado de una cama, me doy cuenta que es adicto a los sofas y cosas de piel. Sigo dando pasos por esa habitacion de color blanco intenso, repleta de espejos. Hay un gigante espejo en el techo y muchos mas en los costados. Esto es de locos, no se por donde empezar.
Una mesita de noche del mismo color que el sofá, esta repleta de cajas minusculas. La cama esta perfectamente hecha, con sabanas de color gris y blanco. Porque es blanca la habitacion, si el resto de la casa parece estar oscureciendo con el tiempo.
Me dirijo a una clase de barra que cuelga del techo. Hay dos agujeros que cuelgan de esta barra, con cadenas casi indestructibles. Sigo dando pasos vagos por esta extraña habitación sin ninguna clase de ventanas.Los espejos que forman parte de la habitacion, hacen que mi cuerpo se sienta desnudo. En la unica pared que hay en la habitacion, hay un cuadro de color azul, algo que no entiendo; simples pinzeladas de color negros y blanco. un armario se puede ver en el lado derecho de la habitacion, doy un par de pasos hacia ahi y me acerco.
Miro a Daniel con cara de sorpresa.
-¿puedo?- pregunto.
El aciente con miedo y verguenza, algo que me parece extraño en sus ojos. Pero no es solo eso, sus ojos parecen ser de otro color; casi negros como el carbón; me sorprendo al ver su extraño color de los ojos. ¿como puede hacer eso?, no presto atención a sus ojos multicolor y me dedico a ver la extraña habitación.
pongo las manos en los pomos del armario y lo abro con rapidez, las cosas son mejor rapidez que lentas. Abro los ojos como platos, al ver todo aquello. hay una clase de cadenas, palos, mazos y cosas las cuales no entiendo.
-¿Eres una clase de Christian Grey?- le pregunto sorprendido, mientras me siento en la cama.
El entra y se acerca hacia mi.
-La verdad es que soy muy diferente a Christian Grey.- responde con tranquilidad y se cienta a mi lado.-El es demasiado Gay y violento.
-¿que quieres decir con eso?
No entiendo nada de lo que esta pasando. ¿es un adicto al sexo?, me tiemblan las manos y quiero irme de este lugar. pero al mismo tiempo la curiosidad y las ganas de saber mas, hacen que mi cuerpo se quede. Se acerca mas ami, junta sus manos con las mias.
-Se que nunca haras nada de lo que hay aqui conmigo, muy pocas personas estan dispuesta ha hacer esto.- mira a su alrededor. Entonces me doy cuenta que hay mas cosas de las que he visto antes. Una puerta que da hacia algun lugar que no quiero ver, una silla de color negro justo delante de la cama y una pequeña clase de nevera gris.- No pretendo que aceptes, pero te pediria que no dijeses nada de esto. Bueno... De todas formas, firmaras un papel en el cual aceptas no decir nada.
Aquello me sorprende, me pongo lo mas rapido de pie. ¿como puede pensar que dire algo de esto?. no podria decir esto, es algo imposible ante mi situacion. las preguntas caerian sobre mi. ¿Como te has enterado de esto?, ¿porque lo dices ahora?. Supongo que no es mi idea, no quiero joder la vida de un multimillonario, no quiero ser centro de todas las revistas y mucho menos quiero que se sepa sobre el pequeño descontrol que Daniel Dilaurenttis tiene en su casa.
-¿Firmar algo?, no dire nada de esto.
por alguna razon, aquellas palabras: Firmar algo. Hacen que me cuestione la verdadera y poca confianza que hemos entrelazado. A lo mejor soy yo, el unico ser de esta habitacion el cual cree que ha entrelazado una conexion con Daniel. porque el parece no sentir aquello y solo quiere utilizarme para ciertas cosas explicitas. Me muerdo el labio inferio, solo de pensar en las cosas que puede hacer en esta cama; tan suabe y con olor a ropa nueva. Me pregunto si es seda de verdad, porque es mas suve que la piel de un bebe.
-No puedo fiarme de nadie, he aprendido que las personas son malas.- dice mientras saca un cigarro de una de sus mesitas de noche.
¿Tambien fuma?, no le habia visto fumar en todo lo que llevamos conociendonos. Realmente me ha dado una cierta impresion extraña, diferente y distorcionada del supuesto multimillonario egoista, manipulador, feroz y aburrido, que hace pensar. Le miro con cara de pocos amigos, cuando se mete el cigarro encendido entre sus labios rosados.
-¿Para que necesitas todo esto?- pregunto sabiendo la respuesta.
-Vera señor Montgomery, muchas personas encontramos placentero algo que parece no estar dentro de lo cotidiano. ¿le parece extraño todo esto?, pues no se preocupe, si en cualquier momento quiere marcharse...
-No me ire de aqui, Daniel.
aquello parece sorprenderle, sonrie y se introduce el cigarro otra vez entre sus labios. ¡Quiero ser ese cigarro!. Me pongo de pie, siento que algo malo pasa aqui y todos estos espejos me ponene los pelos de punta. ¿para que los necesitara?. Sigo caminando por la habitacion, hay latigos colgando de una estanteria de color negro y algunas esposas. ¿Es un sadico?.
Solo tiene veinticinco o treinta años. No se su edad, aquello me hace pensar que soy un idiota. En una habitacion aparentemente de uso sexual y no se ni la edad, del dueño de todo esto. ¿que estoy haciendo con mi vida?.
-¿Porque tantos espejos?- pregunto por lo bajo.
-Las cosas tienen mejor sabor, cuando las ves multiplicada por miles de veces. ¿me entiendes?.
-Lastimosamente no, pero parece ser algo muy complicado.
Se pone de pie con rapidez, sus musculos perfectos se acercan a mi y el me abraza con mucha fuerza. siento como el corazon se me explotara, como el cerebro se me llena de una clase de liquido repugnante y como las manos me tiemblan. Me da un beso con fuerza. ¡maldita vida!.
-Esto es mi secreto, puede que sea dificil de superar y entender.- me sujeta la cara entre sus manos con fuerza.- pero..., espero que en algun momento de tu vida, pruebes este secreto conmigo.
-¿Que esta diciendo?- me siento avergonza, pero al mismo tiempo me gusta aquello.
Sonrie.
-Quiero compartir mi secreto con usted.
-Ya lo ha hecho.
-Sexo señor Montgomery.-me guiña el ojo y me da un beso en la frente.- Sera mejor ir a comer algo, esto me ha dado hambre.
me suelta y sale de la habitacion con rapidez, dejandome con un mal trago en la boca y con el corazón latiendome a miles de latidos por segundo. ¿esto es real?, me muerdo el interior de la boca con fuerza y me dejo caer en el sofa que hay en la entrada de esta misteriosa habitacion del placer.
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El deseo de Daniel (gay)
VampireEden es un estudiante de literatura, ojos verdes y piel bronceada. ¿que le hace especial? Cuando se enamora de su futuro jefe, del misterioso y todo poderoso magnate de los hoteles: Daniel Dilaurenttis. ¿que hace especial a Daniel?. Nada. solo el...