𝙏𝙝𝙚 𝙝𝙖𝙡𝙛 𝙗𝙡𝙤𝙤𝙙 𝙙𝙞𝙖𝙢𝙤𝙣𝙙

3.11

Todo el grupo salió del Sauce boxeador. Aurora estaba ayudando al profesor Lupin a sacar al prisionero, este se resistía a la vez que soltaba súplicas.

- Fui una buena mascota, no me entregues. - Ron no hizo caso, levantó la vista y miró a su amiga de la infancia. - ¡Fui tu rata! -

- Déjalo en paz, seguro que no te callas ni con el beso del dementor. - Tonks le dio un tirón hacia atrás separándolo de los dos amigos que estaban en el suelo.

Remus lo cogió por el brazo mientras le ordenaba callarse. La Hufflepuff observó a lo lejos como Sirius y Harry estaban teniendo un momento íntimo, creando un pequeño apretón en su estómago, no sabía bien si era por envidia o por tristeza, pero no entendía porque su padrino había tenido aquel momento con el Gryffindor antes que con ella, su sangre. Giró su rostro hasta la noche estrellada, necesitaba pensar en otra cosa. A lo lejos vio como las nubes se empezaron a mover lentamente, sin embargo le llamó la atención unas que parecían tapar algo luminoso. De repente sus sentidos se pusieron en alarma, era luna llena.

- ¡Hermione! - le chilló mientras señalaba aquel punto. La Gryffindor alarmada se levantó y gritó por el nombre de Potter.

Todos se quedaron en silencio observando como la luna empezaba a afectar al profesor. Sirius corrió a consolarlo.

- ¡Remus mi amigo! , ¿tomaste tu poción de esta noche? - lo abrazó con fuerza para que este no atacara a ninguno de los niños.

El trío de oro se fue a protegerse  entre ellos, mientras que la pelinegra se quedó donde estaba. Black seguía soltando aquel mensaje para que su amigo se contrólase. En un momento de aquel proceso doloroso Lupin soltó su varita al suelo, el prisionero aprovechó y la cogió pero Tonks se dio cuenta dándole un empujón para desequilibrarlo, él cayó. Se acercó hasta él para agarrarlo del brazo para levantarlo y aprisionarlo mejor. El exGryffindor le dio un arañazo en la cara y aprovechó el momento que estuvo distraída maldición aquel acto inesperado para empujarla por aquella pequeña bajada. La muchacha soltó un grito.

- ¡Aurora! - gritó Sirius. Lo que fue un error, ya que se distrajo y Lupin ya transformado lo envió lejos de un empujón.

La Hufflepuff rodó hasta que al final fue parada por un árbol que estaba ahí. La muchacha se llevó una mano a la zona afectada por el arañazo, mientras que otra mano se la llevó a su cabeza que le dolía de dar vueltas y del impacto final. Por otro lado escuchaba las voces de los demás algo difusas, una parte era por la lejania mientras que otra era porque le estaba fallando la audición. Intentó levantarse pero todo su cuerpo le dolía, se quedó ahí quieta confiando que todo se solucionara y vinieran a por ella, pero los minutos pasaban y parecía que eso nunca iba a pasar, poco a poco fue cerrando sus ojos hasta que ya no sentía nada.

Su cabeza palpitaba, pero ya no tenía frio. Esperaba escuchar el silencio de la noche pero en vez de eso escuchó dos voces masculinas.

- ¿Enserio Hugo?, ¿De verdad me vas a venir con esas? - Dijo una voz enfadada. Aurora se quedó un rato procesando de quien podría ser, el dolor no le dejaba pensar con mucha claridad.

- ¡No la abandoné!, fui avisar a un profesor y avisé a Snape. - dijo serio.

- Ya veo como de utilidad ha sido. - soltó una risa. - Fue tan útil que Aurora apareció con un arañazo en la cara y moratones en su cuerpo por los golpes. Ha sido de mucha utilidad Smith. - gruñó. Era Theodore Nott, la Hufflepuff pudo reconocer esa risa que tenía cuando discutía. - La dejaste sola, dejaste que se metiera en ese Sauce con los ineptos de Gryffindor. -

Smith se quedó callado mientras fruncia el ceño. - ¡Estaba con ellos! y no son lo que acabas de decir. -

Theodore soltó un gruñido de frustración. Veía que no estaba llegando a ningún lado y el muchacho seguía sin reconocer su error.