"Para Estar Juntos" [GenSen Omegaverse] COMPLETA

•°•CAPÍTULO 27: LO QUE SUCEDIÓ•°•

Advertencia: Este capítulo contiene escenas sensibles y descripción de actitudes y/o comportamientos delicados, por favor leer con discreción.

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La atmósfera que les rodeo se llenó unos momentos de silencio, únicamente dejando los jadeos de Gen que luchaba por poder respirar adecuadamente luego de ser atacado de esa forma. Senku, llevo una de sus palmas hasta su frente y masajeó su sien respirando casi de la misma manera, también tratando de relajarse.

El aroma de las feromonas de ambos se dispersó de a poco, hasta que solo mantuvieron la vista uno sobre el otro, pero ahora con sus pupilas de regreso a su color original.

El Omega se removió del agarre por el cual Gen le había tomado, cambió su postura y volvió a sentarse frente a él, Gen agachó su cabeza aferrado a su pecho y mordiendo su labio.

Entonces, el científico soltó una exhalación profunda—Bien, parece que yo también estoy alterado—apuntó su mirada hacia arriba, sintiendo las insistentes punzadas en su nuca—. Tienes media hora, estaré contando—comentó captando la atención de Gen—, escucharé todo lo que me quieras decir en ese tiempo, ¿De acuerdo?

Gen terminó de soltar suspiros y corrigió su postura, sentándose correctamente frente a él, guardando sus manos entre las mangas de su saco—Sí, bien, gracias Senku-chan...—respondió con apuro—Yo...

El mentalista tenía un reto enfrente, expresar todo lo que guardo en esos cinco años en tan poco tiempo parecía imposible y más después de encontrarse a Senku en un estado tan vulnerable, aunque fueran gritos alterados y palabras de enojo, los reclamos anteriores también llevaban algo de verdad. Senku había resentido su ausencia y su Omega fue herido por sus acciones, algo que nunca deseo que pasará. No sabía cómo corregir eso de la forma más viable, así que solo fue sincero.

—Ese día...Yo...—no podía evitar titubear, le costaba hacer que las palabras salieran de sus labios, alzó la mirada, apreciando la mueca fastidiada del chico, sabía que el tiempo corría—Ese día—suspiró—, Hyoga y Tsukasa nos habían encontrado, el ejército del imperio nos había rodeado e incluso habían provocado un incendio para evitar nuestra huída.

Senku contrajo sus pupilas al escucharlo.

—Resultó que tal como creíamos Hyoga volvió a informarle a Tsukasa el hecho de que nos había encontrado, pero no solo eso, también lo convenció de ir a buscarnos, junto con toda su gente. Aunque distorsionó un poco la verdad. 

Si nos hubiéramos ido los primeros días que encontramos el río, muy probablemente nunca nos hubieran encontrado, pero gracias a qué nos retrasamos por mi culpa, lo hicieron—golpeó uno de sus puños contra el suelo—. Cómo todas nuestras rutas de escape estaban bloqueadas, la única alternativa era el río, pero la balsa no estaba completa y ahí, solo podías huir tú, Senku-chan.

No era mi intención, pero fue el único plan que se me ocurrió en ese entonces. Al menos, quería ponerte a ti a salvó...

Senku arrugó sus labios, luego de enterarse de la verdad de ese entonces, no había noche que no se hubiera preguntado cuáles habían sido los motivos de Gen y ahora que los conocía, tampoco estaba satisfecho. Porque eso, aunque fuera la única alternativa, no bastó para ponerlo a salvó.

—¿Y qué hay de ti?—le cuestionó el menor.

—¿Uh?

—¿Qué era...—desvió la mirada—lo que tú ibas a hacer entonces?

Gen dibujo una sonrisa liviana en su rostro antes de responderle—Yo estaba preparado para morir ese día.

Con eso, Senku sintió que una sensación horrible le invadía el pecho.