¿Quieres escribir? Entonces lee la Biblia del Escritor donde encontrarás todos los consejos de escritura dictados por las grandes maestras y maestros de la literatura.
Después de haber leído estos aforismos que se convertirán en tus versículos, p...
51. Me encuentro absolutamente llena cuando escribo un poema, cuando estoy escribiendo uno.
52. Después de haber escrito, rápidamente dejás de ser un poeta y te conviertes en una especie de poeta en descanso, que no es lo mismo para nada. Pero pienso que la experiencia real de escribir un poema es magnifica.
53. Creo que llegaré a ser una buena novelista, muy divertida: lo que escribo me hace reír a carcajadas, y para que pueda reírme ahora (tras mi reciente separación con Ted Hughes), tiene que ser endiabladamente gracioso.
54. Soy escritora... soy una escritora genial; sé que lo llevo dentro de mí. Estoy escribiendo los mejores poemas de mi vida; llevarán mi nombre a la fama.
55. La poesía en su mejor momento puede hacerte mucho daño.
56. Nada apesta como un montón de escritos sin publicar.
57. El chorro de sangre es la poesía y no hay quien lo pare.
58. Recuerdo que mientras escribía un poema sobre "Nieve" cuando tenía ocho años, dije en voz alta, ojalá pudiera tener la capacidad de escribir los sentimientos que tengo ahora cuando soy pequeño, porque cuando crezca, sabré escribir, pero habré olvidado lo que se siente siendo pequeño.
59. Arrogante, creo que he escrito versos que me califican para ser La Poetisa de América.
60. Quiero libros, bebés y guisos de carne.
61. ¿No sabías que voy a ser la autora y artista más grande y divertida del mundo? Bueno, no te sientas mal, ¡yo tampoco lo sabía!
62. Como el mundo de mi mujer se percibe en gran medida a través de las emociones y los sentidos, lo trato así en mis escritos, y a menudo me sobrecargo con pesados pasajes descriptivos y un caleidoscopio de símiles.
63. He sentido grandes avances en mi poesía, el principal de los cuales es una creciente victoria sobre los matices de las palabras y la superfluidad de adjetivos
64. Creo que mis poemas surgen inmediatamente de las experiencias sensuales y emocionales que tengo.
65. Debo disciplinarme. Debo ser imaginativo y crear tramas, tejer motivos, sondear diálogos, en lugar de limitarme a registrar descripciones y sensaciones. Esto último no tiene sentido, no tiene propósito, a menos que luego se sintetice en una historia. Esto último es también un síntoma bastante pronunciado de un ego hipersensible e improductivo.
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