Capitulo 11.

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Narrador omnisciente:

Sabrina caminaba lo más rapído posible tratando de encontrar a dichosos gemelos pelirrojos que habían hecho una de sus no tan agradable bromas.

—¡George! ¡Fred!—Exclama la pelinegra con rabia.

Ambos chicos al escuchar la voz de Sabrina se paralizan totalmente.

—Maldición.—Exclama George.

Sabrina llegan a donde ellos, la chica se veía bastante pequeña al lado de los dos pelirrojos.

—Me explican por qué carajos el gato de Hermione esta azul.

—Quisimos probar un experimento cariño.—Intenta explicar Fred.

—Si querían probar sus experimentos lo hubieran hecho en su rata.—Habla enojada Sabrina.—Hermione está llorando creyendo que algo malo le paso. Lo solucionarán ya mismo ¿Verdad?

Sabrina mira amesante a los dos pelirrojos.

—No es tan grave, ya se le pasará.—Dice George para encogerse de hombros.

Fred le da una mala mirada a su hermano.

—¿A si?—Pregunta Sabrina acercándose a George.

La pelinegra se empina para tomar por las orejas al chico y llevarlo así por varios de los pasillos hasta encontrar a Hermione, Fred detrás de ella, le decía que lo arreglarían, pero que soltara a su hermano.

—Sabrina cariño, por favor tranquilízate.

—¡Hermione esta histérica! Oh... No me digas que quieres estar en el lugar de tu hermano.

Sabrina señala con la cabeza a George, ella aún seguía jalando de su oreja, él estaba agachado para disminuir un poco el dolor. Fred rápidamente alza sus manos a lo que Sabrina sonríe para seguir con su camino.

Varios chicos los observaban con sorpresa y otros con burla, George soltaba quejidos y Fred iba corriendo tras ella.

Al llegar a donde estaba Hermione y su mascota, Sabrina suelta la oreja de George, que gracias a los tirones tenía roja.

—¡Adivine quienes eran los culpables cariño! Todos tuyos, Hermione.—Dice Sabrina para disponerse a salir de la habitación.

—Sabrina, cariño, perdóname.—Dice Fred saliendo tras ella.

—¿De quién fue la idea?

—De George.—Sabrina enarca una ceja.—Te lo juro.

—Bien.

Fred la toma de la cintura para besarla, Sabrina le sigue el beso para después negar con su cabeza.

—Aún sigo enojada.—La pelinegra le guiña un ojo para seguir su camino.

Fred suelta un suspiro, Sabrina le encantaba.

Sabrina caminaba a pasos rápidos para lograr llegar a su clase de adivinación, gracias al problema que tuvo con los gemelos tuvo un retraso, al llegar la atención de todos va a la pelinegra, de maneras que la mirada de su profesora también está en ella, Sabrina le sonríe.

—Lamento llegar tarde, tuve un pequeño percance.—Se excusa ella para buscar con quien sentarse.

Gracias a que habían varias asignaturas optativas, Pansy y Sabrina no habían escogido las mismas, en esta ella se juntaba con Hermione, pero gracias al problema con su gato ella faltó.Sabrina distingue a Tom así que con una sonrisa ella se sienta con él.

El corazón enemigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora