Eternamente. Siempre: Una Historia En El Tiempo.

Cap. 62. Insomnio

Unos días habían pasado, Thor había tratado de convencer a Hulk de ir a Asgard, sin éxito. Brunn llegaba en ocasiones a traer a Hulk para entrenar. Según observaba Thor, la Valquiria y el monstruo verde se llevaban muy bien al parecer, pero Brunn trataba de evitar a Thor a toda costa.

Brunn no quería saber nada ni recordar nada, por eso había pasado años y siglos ahogándose en licor para olvidar. Y Sakaar era un buen lugar para olvidar.

El dios del Trueno necesitaba un plan para escapar y esperaba que Claire averiguara como salir. Mientras observaba el Quinjet desde la ventana, cerró sus ojos y usó su magia para comunicarse con Heimdall.

Claire llegó a darle tratamiento, un rato después.

-Asgard está sitiada y Heimdall me dijo que Hela cada vez cobra más fuerza de Asgard -contaba Thor-. Él, Sif, Volstagg y Fandral están refugiando al pueblo en una antigua fortaleza, pero la única salida es escapar por el Bifröst.

-¿Evacuar Asgard? -preguntó ella asimilando las palabras de Thor-. ¿La fuerza de Hela está ligada a Asgard, entonces?

Thor asintió.

-No hay mucho que hacer, Claire, nada más que sacar a mi gente de ese lugar.

-Bien, mira, conozco unas salidas pero necesitamos autorización, creí que por ser invitada podía disponer de salir fácilmente, pero se necesita alguna buena justificación. Ya se me ocurrirá algo para ir a buscar el Quinjet -dijo ella terminando de guardar la máquina-. Ah, y dudo que Loki quiera ir.

-Olvídate de él. Veré la forma de convencer a Banner y Val.

-¿Val?

-Así prefiero llamarla... aunque ella no lo sabe -explicó Thor haciendo un ademán con sus manos-. Ya sabes, diminutivo de Valquiria...

-Dudo que le guste que le llamen Valquiria. Esa tipa sí es dura, ¿sabes?. Suerte.

Claire se marchó de ahí lo más pronto que pudo, dejó su maletín en su habitación y descansó un poco.

Por la noche, no había ido a cenar, se había quedado en su habitación. Ella se dio un baño de agua caliente, pues se sentía cansada después de casi 3 semanas que habían pasado desde que llegó de Asgard.

Claire además, se sentía preocupada, y mientras se secaba el cabello con la secadora, divagaba en sus pensamientos. Pensaba en como quisiera comunicarse con Pepper y Tony y contarles lo que pasaba, poder pedir ayuda, aunque sabía que era imposible que Iron Man volara por el espacio a miles de años luz. Los extrañaba mucho, y a Vicky y Chris, también.

De repente, pensó en las palabras de Loki, eso de que la acusó que ella tenía miedo de caer en sus encantos. Claire se rio. El dios estaba loco. Loki se pasaba de absurdo a veces, pero es que su ser engreído siempre tenía que salir a flote.

Era inverosímil pensar que ella pudiera sentirse inclinada o atraída por él, pensaba. Claire jamás se podría enamorar de alguien tan superficial, egoísta y arrogante. Eso era verdad. Además, él era el dios de las Mentiras, entonces, caer en sus encantos era algo imposible, eso no tenía discusión.

Mientras seguía pasando el aire caliente de la secadora por su cabeza, sus pensamientos se enredaban más, a parte de su cabello, porque por momentos se olvidaba de pasar el peine como debía. Lo que ella y Loki tenían, ni siquiera podía llamarse amistad, pensaba Claire, puesto que como él le había dejado claro, esa vez en el Bifröst, ella no era su amiga. Definitivamente, él no era su amigo.

Claire continuó secando otro mechón de su cabello. Quizá solo eran conocidos, así como el dios le dijo al Gran Maestro. Sí, eso eran.
Estaba segura que el poco afecto que le tenía a Loki, era por qué él era hermano de Thor y porque Frigga siempre pensaba lo mejor de su hijo y decía que ella veía más luz en Loki. Pobre Frigga, ella quería creerle a la diosa, también.
A parte de eso, sabía que Loki tenía un corazón ahí debajo de ese iceberg que tenía en su pecho. Sabía que había sufrido terribles cosas y que en ocasiones era un ser vulnerable aunque él no lo admitiera nunca.