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Tan pronto como entró en la habitación, Vaggie inmediatamente sintió como si le hubieran quitado un enorme peso de encima. Dejó escapar un suspiro de alivio, se sacó el pelo de la práctica coleta alta que había acostumbrado a llevar durante el día y lo sacudió, desplegando sus alas y estirándose. ーMaldita seaー murmuró.
El día había sido agotador: entre la afluencia masiva de nuevos residentes al hotel y el mantenimiento continuo que se necesitaba constantemente en la estructura recién reconstruida, no quería nada más que desmayarse en su cama. Pero…algo no estaba del todo bien. «¿Dónde está Charlie?»
Se acercó al pequeño cuarto de baño y probó la manija. Tenía seguro. Ella llamó a la puerta. ー¿Charlie? ¿Estás ahí, cariño?
Sonrió cuando escuchó la alegre respuesta de su novia; ーSí, Vaggie, me estoy preparando para ir a la cama y poniéndome un poco de loción. Creo que tengo una especie de sarpullido en la espalda, me pica mucho.
ー¿Quieres que le eche un vistazo?ー ーPreguntó Vaggie.
Con el clic de la cerradura, Charlie abrió la puerta y le devolvió la sonrisa a su novia. Vaggie sintió que el calor le subía a las mejillas y de repente se sintió avergonzada por lo nerviosa que se puso al ver a alguien a quien había visto un millón de veces ya.
ーClaro, síー, dijo Charlie, ignorando amablemente el estado de Vaggie y dándose la vuelta, recogiendo su cabello delante de sus hombros para que el ángel pudiera ver su espalda desnuda.
Vaggie jadeó suavemente al verla. ーUm... sí, definitivamente hay... algo...ー Los hombros de Charlie parecían enrojecidos, como si la piel se estuviera agrietando o estirando, y los huesos mismos parecían estar saliendo más de lo habitual. Casi parecía como... «Oh. Oh, joder»
ーOh... uh...ー Se calló, insegura de sí misma. ーCharlie, ponte una camiseta sin mangas o algo así, ¿bien? Voy a... ir... a buscar a tu papá. ¡No te preocupes, está bien!ー Salió corriendo de la habitación, dejando a su confundida novia mirando fijamente hacia la puerta.
Corrió escaleras arriba, sus alas emergieron y la llevaron por las escaleras hasta los pisos superiores con algunos aleteos. Tan pronto como sus pies estuvieron nuevamente en el suelo, corrió por el pasillo y comenzó a golpear frenéticamente la puerta de la habitación de Lucifer.
Después de lo que parecieron años, pero probablemente fueron solo un par de minutos, Lucifer abrió la puerta, con el sombrero notablemente ausente y el cabello rubio revuelto como si acabara de levantarse de la cama. ー¿Vaggie? ¿Qué pasa?
