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Estaba nervioso, iba a hablar con Jimin después de 4 años y le iba a contar la verdad, absolutamente toda la verdad y eso le aterraba, tenía miedo que no le creyera, que suceda lo que pasó en el pasado, que de nuevo...

NO! Tenía que tener fe, de que las cosas iban a salir mejor, y si no pasaba así, de que encontraría la forma, Yoongi tenía razón, debía dejar de estar en ese vaivén de tristeza y negatividad o nunca iba a poder recuperar a Jimin y menos ver a su hija.

Asomó la cabeza por la puerta observando a Yongsun en su escritorio, necesitaba avisarle, avanzó llamando su atención.

—Jefecito necesita algo? — La chica regresó su mirada a la computadora esperando una respuesta del alto — Otro café?

—No — Soltó en un suspiro — Hmm, verás, alguien vendrá a verme, dejas que pase a la oficina, no hay necesidad de que me avises, sólo haces que pase.

La chica elevó la mirada mirándolo extrañada, pero no dijo nada, obviamente Jeon lucía nervioso, pero ella no podía hacer nada, era una orden y debía cumplir.

—Claro.

El alto regresó a la oficina y se sentó a esperar paciente, pero parecía que los minutos pasaban lento, muy lento, mordió su labio inferior con fuerza al punto de que lo hizo sangrar, trató de no ver la hora y comenzó a pensar en cómo le diría las cosas a Jimin, cómo le explicaría todo para que no lo tachara de mentiroso o no le creyera.

Había estado tan concentrado en sus pensamientos que no había escuchado el momento en que la puerta fue abierta y una persona había ingresado, no hasta que unos nudillos tocaron sobre su escritorio haciendo que levante la mirada hacia la persona.

Su cuerpo se paralizó, no podía estar pasando, no podía.

Su peor pesadilla se encontraba frente a él, con aquella aura de superioridad, el cabello recogido y aquella sonrisa de suficiencia, luciendo tal cual 4 años atrás, luciendo como la persona que arruinó su vida, ella estaba de vuelta y él, él sólo estaba paralizado.

—Vaya, no sabía que volveríamos a vernos, ha pasado mucho tiempo no? 4 años más o menos? Sí, ha pasado esa cantidad.

Su cuerpo se paralizó, sentía que el oxígeno no estaba ingresando a sus pulmones, no podía estar pasando, no podía...

—Parece que sigues siendo aquel niño alfa asustadizo — Se burló — No cambias Jeon.

Jungkook tragó grueso, su corazón latía desenfrenado al punto que sentía se le iba a salir del pecho o explotaría, quería llorar, gritarle, golpearla, pero no podía, no podía hacer eso.

—Qué hace acá? — No supo como, pero su voz salió firme a pesar del miedo — Cómo mierda entró a mi empresa y a mi oficina?

Esta vez fue un poco más rudo, los recuerdos dolorosos recorrían su mente, las lágrimas de Jimin, el dolor que le causó, el no haber podido ver crecer esos 4 años a Hyori, sí, el odia estaba creciendo con mucha fuerza.

Ella se sentó frente a él frente el escritorio, sonrió observándolo y Jungkook quería borrarle esa maldita sonrisa de la cara, quería arrancarle la cabeza y arrojarla al fuego, se estaba conteniendo muchísimo y no supo por qué, pero su lobo estaba despertando.

—Wow, parece que has crecido un poco — La mujer cruzó las piernas — A diferencia de hace 4 años que sólo llorabas y no tuviste más opción que aceptar mi propuesta, quién diría que Jeon Jungkook se volvería un alfa de verdad.

La burla recorría cada una de sus palabras, el alfa solo quería hacerla desaparecer de su vista, lo más pronto posible, mucho más considerando que cierto rubio cruzaría en cualquier momento su puerta.

Tiny Secret 💗 [kookmin au]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora