estado enviando a sus hijos aquí y es por eso que somos la mejor escuela preparatoria de los Estados Unidos". Nolan hizo una pausa para escuchar los aplausos que siguieron.
"Estudiantes nuevos", continuó, dirigiendo su atención hacia los niños más nuevos en unirse a las filas de la Academia Welton, "la clave de su éxito reside en los cuatro pilares. Esto se aplica tanto a los estudiantes de séptimo grado como a los estudiantes transferidos". Todd Anderson se retorció de nuevo en su asiento ante la mención de los estudiantes transferidos, y su rostro reveló su timidez. "Los cuatro pilares son los lemas de esta escuela y se convertirán en las piedras angulares de vuestras vidas.
"Richard Cameron, candidato de la Sociedad Welton", llamó Nolan, y uno de los chicos que llevaba una pancarta se puso de pie.
"¡Sí, señor!" -gritó Cameron-. Su padre, sentado a su lado, sonreía de orgullo.
"Cameron, ¿qué es la tradición?"
"La tradición, Sr. Nolan, es el amor por la escuela, el país y la familia. ¡Nuestra tradición en Welton es ser los mejores!"
"Bien, señor Cameron.
"George Hopkins, candidato de la Sociedad Welton. ¿Qué es el honor?"
Cameron se sentó rígido mientras su padre sonreía con suficiencia.
"¡El honor es dignidad y cumplimiento del deber!" respondió el chico.
"Bien, Sr. Hopkins. Knox Overstreet, candidato a la Sociedad de Honor". Knox, que también sostenía una pancarta, se puso de pie.
