𝓗𝓮𝓻𝓮𝓭𝓮𝓻𝓸𝓼 | 𝓗𝓪𝓸𝓫𝓲𝓷

11. 𝓝𝓸 𝓼𝓮 𝓹𝓾𝓮𝓭𝓮 𝓸𝓬𝓾𝓵𝓽𝓪𝓻 𝓵𝓸 𝓺𝓾𝓮 𝓼𝓮 𝓼𝓲𝓮𝓷𝓽𝓮

Mientras todos buscaban los objetos del tesoro perdido, el menor de los jóvenes notó que algo extraño estaba ocurriendo con su primo y el príncipe de China, y es que estos, en lugar de buscar los objetos como el resto, se habían apartado de la multitud.

―¿Qué tanto miras? ―Le preguntó Taerae a Yujin ―¿Sabes dónde podemos buscar las rocas negras?

―En el mar ―Respondió Yujin sin dejar de observar hacia lo lejos ―. Tengo que ir al baño y no creo que regrese pronto.

―¿No regresarás pronto? ―preguntó Gunwook ―¿Quieres que te acompañe?

―No, ustedes busquen....

―¡Ya! No quiero seguir haciendo equipo contigo ―Gritó Gyuvin.

―¿Ahora qué ocurre? ―Preguntó Taerae.

―Al parecer mi primo ya peleó con ese duque ―dijo Yujin para luego apartarse.

Como Gunwook no quería que siguieran discutiendo, él corrió hacia donde estaban Gyuvin y Ricky y se puso en medio.

―¿Por qué discuten? ―preguntó el más joven.

―Porque él no quiere hacer nada. Así perderemos ―Dijo Gyuvin con mucha molestia

―Es solo un simple juego del tesoro, no te lo tomes tan personal ―dijo Ricky mientras se colocaba bloqueador solar y lentes de sol.

―Como sea, al parecer ahora todos los equipos son de a dos, porque Yujin decidió no seguir jugando ―dijo Gunwook.

―¿Qué tal si intercambiamos de pareja? ―preguntó Gyuvin ―. Yo iré contigo ―le dijo A Gunwook mientras tomaba su brazo ―. Contigo me llevo mucho mejor ―Miró a Taerea ―¿Son amigos? ¿Por qué no hacen equipo juntos?

―Eh... si, está bien ―dijo Taerae mientras miraba a Ricky quien le indicaba con la mirada que no quería intercambiar ―, pero así no fue como decimos que haríamos las cosas y quizás los demás equipos ya nos lleven ventaja.

―Es cierto, Matthew es muy competitivo ―dijo Gyuvin mientras acariciaba su barbilla―, pero por alguna razón, casi nunca gana un juego.

―No veo al joven duque y a Jiwoong por aquí ―dijo Gunwook con preocupación.

―No te preocupes. De seguro están concentrados en ganar el juego. Jiwoong y Matthew son grandes amigos desde que tengo memoria y siempre que Matthew tiene alguna idea extraña, Jiwoong hyung lo cuida y lo sigue.

―Que suerte tiene ese duque ―Susurró Ricky.

―¡Cachorrito! Aquí estabas ―dijo Wonyoung con felicidad mientras abrazaba a Gyuvin ―¿Qué están haciendo?

―Nada importante ―Le respondió Gyuvin ―¿Quieres ir por un jugo de coco?

―Me encantaría hacer eso ―dijo Wonyoung ―, pero antes. Hay que tomarnos fotografías juntos ―Tocó su bolso ―¿Dónde está mi teléfono?

―¿No lo tenías hace un momento? ―preguntó el más alto.

―Si pero es que... ―Miró hacia varios lados ―¿Se me habrá caído?

―¡Noona! ―dijo Yujin mientras corría hacia ella ―¿Este es tu teléfono? ―Se lo entregó ―. Lo encontré cerca de las rocas y creí que lo ibas a necesitar.

―Gracias, pequeño ―dijo la joven con una linda sonrisa.

―Ahora podemos irnos ―expresó con calma el marqués coreano.

―¿A dónde irás? ―le pregunto Ricky a Gyuvin mientras sostenía su brazo ―. Se supone que somos un equipo.

―Ahora está Yujin. Pueden hacer equipo con él ―respondió Gyuvin para luego apartarse con su novia.