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Me toma de ambos brazos y me mira a los ojos.
Al ver sus ojos verdes me siento llena, me siento completa y a la vez me siento sola. Siento que estoy al límite de todo y creo que Nikki no tarda en colapsar también. No puede cuidar de mi como si fuese una niña pequeña, no puedo depender de nadie y mucho menos retener a alguien por lástima.
Pero... lo amo y no podría estar lejos de él, no me imagino mi mundo sin el y sin esa sonrisa encantadora que tiene. Además sus ojos rebelan al hombre fuerte que es y que siempre ha sido, una mirada realmente bella.

- ¿Qué puedo hacer para que te sientas bien? - me pregunta mientras sus manos acarician mis brazos desde arriba hacia abajo.

- Nada, nada se puede hacer. - respondo mientras tono aire para continuar hablando. - Supongo que no hay nada que hacer y tengo que aprender a vivir como estoy ahora.
Ambos tenemos problemas Nikki, otra vez has caído en la bebida y siento que también todo esto es culpa mía.

- ¿Qué? No, esto no es tu culpa ya que fue mi decisión hacerlo.

- No es necesario que digas mentiras.

- No es mentira. - me toma de ambas mejillas. - No sabes lo difícil que es para mi estar "sobrio". Aveces hay noches que me despierto porque siento la necesidad de ir a buscar la heroina y meterla en mis venas. Últimamente estoy de mal humor por lo mismo.

Ahora entendía muchas cosas, ahora entendía porque sus cambios repentinos de humor hacia a mi y porque aveces es tan hiriente.

- Creo que no somos siendo sinceros con nosotros.

- No, ninguno de los dos muestra lo que realmente está pasando.
Sabes... cada día que pasa sin meterme la heroina es como un puto infierno y a la vez es el mismo cielo. Me quemo por dentro por ella y otras veces me falta el puto aire, pero me hago fuerte por ti ya que ahorita no necesitas bajones de nada.

- No quiero que me tengas lastima, Nikki.

- No es lástima, es amor lo que siento por ti que incluso te oculte todo esto que siento desde que dejé la heroina y la coca. No es fácil ser sobrio y empezar desde cero.
Los problemas con los chicos de la banda han ido creciendo y Vinnie no aporta nada.
Además... verte cada día más apagada me enferma más y no poder ayudarte con nada es aun peor.

- No quiero retenerte, Nikki.
Tu tienes que vivir tu vida sin importar como este yo. Si tu tienes problemas tienes que sacarlos a relucir conmigo que soy tu pareja y juntos...

- Creo que me están aconsejando con algo que no aplicas. - me toma de los hombros. - Deberiamos de ser sinceros.

- Deje de ser sincera conmigo desde hace tiempo y por eso mismo no puedo serlo contigo.
Me quiero engañar siempre que todo esta bien y que volveré hacer lo que realmente amo, pero se que no será así de nuevo.

- Aveces las cosas no salen como uno la planea pero... que más das. Las cosas así son y los planes jamás salen como los esperamos.
Yo no planeaba enamorarme de ti pero me fue imposible no hacerlo y ahora estoy aquí contigo.
Estamos comprometidos y pronto seremos esposos.
Falle en mi plan y no me arrepiento en lo absoluto.
Tu no te imaginabas que ibas a dejar de patinar por un accidente y que tu vida daría un giro de 360 grados. Creo que deberías de aprovechar tus talentos y mostrarlos al mundo.
Tocas el piano, pintas hermoso y además diseñas ropa increíble.

- ¿Todos los días será así?

- ¿Como?

- ¿Siempre me vas a hablar así de lindo cuando me sienta fatal?

- Todos los días de vida si es preciso. - responde serio y acaricia mi mejilla. - Haría cualquier cosa por verte sonreír y ver esos dos hoyuelos que se forman en tus mejillas al sonreír.

My little girl... (Nikki Sixx)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora