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En una pequeña y acogedora sala, el ambiente era una oda a la nostalgia y la creatividad. Carteles de música y conciertos, reminiscencias de una época hippie, adornaban las paredes, añadiendo un toque de color y energía al espacio.

Un tocadiscos antiguo ocupaba un lugar destacado en una esquina, rodeado de una cuidadosa colección de discos de vinilo que reposaban ordenadamente en estanterías de madera. Los sillones, tapizados en telas de colores vivos y texturas suaves, invitaban a acurrucarse y perderse en la música mientras la luz tenue de las lámparas creaba una atmósfera íntima y relajante.

En medio de esta escena, una voz tarareante llenaba la sala, acompañada por el suave crujir de la aguja sobre el vinilo. El sonido cálido y nostálgico se mezclaba con el aroma de incienso que flotaba en el aire, creando una sensación de paz y serenidad.

Sin embargo, la tranquilidad se vió interrumpida cuando la imagen en el televisor encendido, de apariencia antigua, se cortaba de repente por una transmisión de noticias, rompiendo la armonía del momento.

-Lamentamos interrumpir su sintonización habitual.- Anunció el serio periodista, con una expresión grave y preocupada mientras se preparaba para dar una nota. -Pero como noticia de última hora, se ha dado a conocer la vuelta del niño que se presumía desaparecido desde hace más de un año. James Alexander Manderville.-

El tarareo se detuvo, y la imagen mostró rápidamente una imagen de un pequeño Alex en una antigua nota de periódico, pasando imágenes y videos de diferentes secuencias. El orfanato Mandeville, hace más de doce años, todo incendiado. Los videos caseros de vehículos de policía cuando de una ventana de colectivo salió volando una figura para chocar con él. Secuelas en el arco Gateway, con una cámara de seguridad, antes de volver a enfocar al periodista.

-Fuentes actuales informan que su verdadera identidad es Alex Grace, otro hijo perdido de la difunta actriz Beverly Grace.- Continuó el presentador, su voz resonando en la sala mientras las imágenes seguían corriendo. -Berly Grace, una mujer importante en la industria del entretenimiento, sucumbió trágicamente al alcohol hace casi cuatro años. Dos hijos desaparecidos, y un tercero que ha vuelto. Ahora, después de tanto tiempo, Alex Grace reaparece después de más de un año sin ninguna noticia, solo para seguir causando destrozos.-

Las imágenes corriendo de nuevo con los casos más actuales en el Smithsoniano, mostrando una cámara de una familia cuando al atropelló las puertas del museo, mostrando a Alex deslizándose junto a un gato. Del mismo modo que de una cámara de seguridad en la presa Hoover, dónde se lo podía ver saliendo de un baño completamente empapado, filmado en blanco y negro.

-A pesar de su regreso, las autoridades han emitido una alerta roja para detener a Alex Grace.- Concluyó el presentador, su voz llena de suspenso mientras las imágenes se desvanecían en la pantalla, y regresaban a él. -Se les pide a todos los ciudadanos estadounidenses que mantengan su distancia de él. Informen a las autoridades, y por favor, tengan cuidado con él. Nadie sabe de lo que es capaz.-

La televisión se apagó con una exhalación cansada.

-Ese niño...- Murmuró la voz de una mujer de cabello negro, soltando el control remoto sobre el sofá.

Lo que parecía una alfombra en el suelo en un inicio, se movió, levantándose lentamente por lo que parecían cuatro enormes patas. Todo para revelar un enorme león que gimió mirando a la mujer.

-Nunca se cansa de meterse en problemas, ¿verdad?- Sonrió, acariciando al animal que se inclinó al tacto de la señora.

Pero con otro suspiro, la mujer se quitó lo que parecían unas gafas para leer de cristal oscuro, masajeando el puente de la nariz, antes de abrir sus ojos verde-azulados y decir con total cansancio.

-Ahora tendré que arreglar todo... de nuevo.-



N/A:

¿Quién podrá ser...?

-Imprudente.- "La Maldición del Titan." (Saga Percy Jackson x Oc)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora