Se avecinaban las vacaciones de Navidad y definitivamente regresaría a la mansión, bueno realmente iría a la mansión Malfoy donde pasaría como todos los años, navidad.
Algunos se quedarían a pasar la Navidad, como Parkinson, Zanini, Goyle, Grabbe y Theodore.
No estaba seguro si los otros se quedarían, creía también que Grindelwald se decidiría por pasar navidad en Hogwarts.
-Ariana, pensé que pasarías la navidad aquí-dijo Matheo, levanté mi vista y vi como Ariana entraba con sus maletas, lista para irse.
_Oh, sobre eso... decidí que pasaría la Navidad con mi abuelo, ya lo extraño-Dijo con una sonrisa mientras tomaba asiento al lado de Draco.
-¿Al final quienes se quedarán aquí?- Pregunto lorenzo.
-Blaise, Goyle, Grabbe, Theo y yo-Contesto Parkinson.
_Realmente no quiero ir a casa, elijo pasar la Navidad aquí junto a ustedes-Agrego Theodore.
Todos sabíamos que Nott tenía problemas con su padre y hacia lo posible por no enfrentarlo.
Pronto nos preparamos para irnos, "me despedí" y luego sali
-Los veré luego y esperen mis regalos- Escuché decir a Ariana mientras avanzaba con todos los demás.
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Regresamos a la mansión Malfoy, y luego de que la señora Malfoy nos saludara cariñosamente, aunque conmigo tuvo un poco de distancia ya que sabe que me molesta el contacto físico.
Pasaron los días y ella nos llevó a Draco y a mi a comprar los regalos, realmente preferí que la mayoría de regalos los elegiría la señora Malfoy.
Aunque algunos elegía yo, como el de Draco, señora Malfoy, Lucius, Matheo y...
No sabía si dejar que la señora Malfoy elijera el regalo de Ariana. Tenía pensado ya en que darle, me guiaría por las cosas que menciono ese día en la biblioteca.
A Matheo le compré joyería, no se me ocurrió otra cosa, a Draco le compré una docena de perfumes que sabía que amaría, a la señora Malfoy le elegí ropa de marca y a Lucius Malfoy le compré un bastón nuevo bañado de piedras preciosas.
Luego de elegir el regalo de todos, me quedaba una persona, Ariana.
Ya tenía en mente que regalarle, sirvió, escuchar en vez de hablar.
El día que coincidimos en la biblioteca, me habló sobre unos libros muggles que le gustaban, exactamente "la mitología griega" así que con todo el sufrimiento del mundo, tuve que ir al mundo muggle a una librería, donde era la única manera de encontrarlos.
Luego de ese martirio, pase a una tienda de joyería, donde vi un anillo de estrella, y supe de inmediato sería el regaló perfecto para complementar.
No necesitaba conocer a Ariana toda una vida para darme cuenta, lo obsesionada que estaba por la astronomía.
Por fin regresamos a la mansión y luego le pedí a los elfos que envolvieran los regalos.
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Me desperté cuando Draco entro a mi habitación, con inmenso entusiasmo a decirme que ya era navidad y que habríamos los regalos.
Luego de desayunar empezamos abrir los regalos, aunque realmente no era demasiado emocionante para mi.
Abrí muchos regalos y cuando ya faltaban pocos, note uno en especial que te tenía envoltura verde con moños.
Lo abrí y al ver la nota, supe que se trataba del regalo de Ariana, empecé a abrirlo con curiosidad.
Al abrirlo contemple sorprendido, el libro que había estado buscando hace tiempo.
¿Como lo consiguio? Yo lo busque por meses y no tuve ni referencias de el y apenas habían pasado apenas unos meses desde que le dije sobre el.
Pensé que era lo último, hasta que escuche como algo en la caja se movía, al profundizar mi búsqueda en la caja, tome en mis manos una caja negra, al abrirla me di cuenta que era un anillo de serpiente con ojos de esmeraldas.
Me gusto. Increíblemente me gustó, el regalo. Guarde el libro en mi habitación y me puse el anillo.
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El amor prohibido de los Herederos.
FantasyAriana Grindelwald, una bruja de la alta sociedad que intenta vivir con la presión de ser hija y nieta de dos magos extraordinarios. Ella tártara de demostrar que es digna de poseer dos grandes y poderosos apellidos. A medida que crece y conoce a un...