Todo el viaje no pude evitar estar tensa, aún sentía frío, pero supuse que era por el frío, pues el susto ya había pasado ¿No?
Todavía no tengo idea de lo que pasó, sin embargo planeó averiguarlo.
Faltaban aún algunos minutos, por lo que decidimos retomar nuestra antes interrumpida charla.
Finalmente se detuvo el tren en la estación de Hogsmeade, y se formó mucho barullo para salir del tren.
La mayoría de estudiantes luchaba por salir a toda prisa del tren.
Cuando nosotros estábamos apuntó de hacerlo, un estudiante paso bruscamente a mi lado, provocando que me tambaleara.
—Fijate idiota—Escuche decir a Tom, quien se veía enojado y provocando que el estudiante se disculpará inmediatamente con la cara llena de vergüenza.
—Esta bien, Estoy bien—Dije intentando calmarlo.
—Esto es un caos—Hablo Matheo, quien se recargaba en la pared, esperándo impacientemente.
—¿Los otros habrán salido ya?—Pregunto frunciendo el seño mientras intentaba buscarlos entre la multitud.
—No, aquí estamos—Escuche responder una voz que definitivamente era de Blaise.
Draco se colocó a mi lado y les lanzó una mirada asesina a los estudiantes que venían atrás. Gracias a eso pudimos salir, sin obstáculos que se interpusieran.
Finalmente se detuvo el tren en la estación de Hogsmeade, y se formó mucho barullo para salir del tren.
Cuando toque el suelo firmé y respire el aire fresco, me sentí menos apretada.
Junto al resto de los estudiantes, seguimos un camino en donde estaban unos carruajes, para transportar a los estudiantes.
En los carruajes cabían al rededor de 3 o cuatro personas, por lo que me fui con Draco y Tom.
Los carruajes parecían ser tirados por caballos invisibles, pues apenas cerramos las puertas, este se empezó a mover.
Durante el camino retomamos nuestras charlas.
—¿Vieron el periódico?—Fue la pregunta casual de Tom, pero esta, estaba cargada de seriedad.
—No, pero mi padre me lo dijo—Respondio Draco.
¿Que periódico? Estuve demasiado ocupada y no tuve tiempo de enterarme de alguna novedad.
—No, ¿Que sucedió?—Pregunte, mientras esperaba su respuesta.
—¡¿No te has enterado?!—Exclamo Draco, con asombró
—Sirius Black ha escapado de Azkaban—Respondió Tom, dejando el misterio.
¿Sirius Black? Es imposible que escapen de esa prisión. Según mi abuelo, nadie jamás lo hizo.
—¿Pero como ha pasado? Es imposible—Exclame casi en un grito.
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El amor prohibido de los Herederos.
FantasyAriana Grindelwald, una bruja de la alta sociedad que intenta vivir con la presión de ser hija y nieta de dos magos extraordinarios. Ella tártara de demostrar que es digna de poseer dos grandes y poderosos apellidos. A medida que crece y conoce a un...